ASESINADA. PARA UN VELO DE TELA

Por IBI World Japon el 4 octubre 2022 / Derechos humanos, Dossier Detener La Tortura, IBI World Japón / Escribir un comentario

Hay cuatro o seis de ellos con monos de camuflaje. Han esperado quizás durante horas, en una furgoneta aparcada en una esquina, para ver a una chica con el velo fuera de su sitio. Bajan del vehículo como perros rabiosos, armados con palos, y comienzan a golpearla salvajemente, sin escatimar golpes a los que intentan defender a la pobre mujer. Son mastines desatados por un régimen odiado e incapacitado que sólo sobrevive gracias a la brutalidad. Son los policías de la moral iraní: bestias pagadas para matar y humillar a las mujeres de su país, y son demasiado eficaces.

La población reconoce los camiones y trata de prestar atención cuando los ve. Pero a los 20 años, siempre hay alguien que intenta la proeza, o se distrae, o no es capaz de valorar lo que puede pasar. Es un momento. Estabas en compañía de amigos y amigas y hablando de los miles de millones de cosas maravillosas que son un tema a esa edad, y un segundo después estás en el suelo, cubierto de tu propia sangre, y muerto a golpes. Porque eres una mujer, y el régimen odia sobre todo a las mujeres, especialmente si son jóvenes.

Ser mujer, en gran parte del mundo, es una carrera cuesta arriba. La serenidad está prohibida. Maltratadas y humilladas durante siglos, siervas o esclavas, serviles a los cobardes que sólo hacen su fuerza en las jaulas o en los uniformes, se les niega la tranquilidad, e incluso pasar desapercibidas. La violencia contra ellas se enmascara con tabúes religiosos, y esto no sólo ocurre en los países en los que el fundamentalismo está en el poder, sino que en esos países, por supuesto, la persecución de las mujeres se produce a la vista, sin ocultarse.

Allí donde la incapacidad de dirigir una nación está enmascarada por el extremismo religioso, por desgracia, la situación es peor que en otros lugares. El derecho es sustituido por las normas de la shari’a, que es un conjunto de indicaciones tomadas en pequeña parte del Corán, y sobre todo de textos y comentarios posteriores (no todos reconocidos como sagrados por todas las numerosas facciones musulmanas), y que divide las acciones humanas entre lícitas y, en el fondo de una escala de prohibiciones, intolerables.

Una ley que cada régimen antidemocrático moldea a su gusto, y que ya no tiene nada que ver con las recomendaciones hechas por Mahoma. Como esta ley también prohíbe celebrar contratos de seguros y ganar dinero mediante préstamos, la capacidad económica de los estados que la aplican es limitada^[1]. Se trata de los países (como Afganistán, Irán, Mauritania, Yemen y Sudán) en los que los regímenes teocráticos son más intransigentes y más violentos contra las mujeres, por no hablar de las zonas en las que los grupos terroristas, como Boko Haram en Nigeria, hacen del odio a las mujeres una herramienta de chantaje contra los Estados en los que operan^[2].

Entre las normas más notorias están el uso obligatorio del velo (hiyab) y la ropa holgada para ocultar el pelo y la forma^[3]. El hiyab obligatorio es uno de los tres pilares ideológicos que quedan del régimen en Irán, junto con los lemas «Muerte a América» y «Muerte a Israel»^[4]. Uno de los países más ricos del planeta lleva casi medio siglo sumido en una profunda crisis económica, y la teocracia se ha vuelto insoportable para la gran mayoría de la población. La policía moral, conocida como Gasht-e Ershad^[5], es el brazo armado del régimen, la forma más eficaz de obligar a todos a tener miedo. Este grupo, el 13 de septiembre de 2022, detuvo y golpeó a Mahsa Amini, una joven kurda que murió tras tres días de indecible sufrimiento en el hospital^[6].

La muerte de Mahsa

Gasht-e Ershad, la policía moral iraní^[7]

Mahsa Amini, de 22 años^[8], junto con su hermano Kiarash^[9], viaja entre la capital y la casa de sus padres en el noroeste del Kurdistán^[10]. A la entrada de una estación de metro es detenida por la policía de la moral porque no lleva el hiyab correctamente^[11]. Su hermano intenta explicar que no conocen Teherán y ruega que no detengan a su hermana^[12]. Los matones le dicen a Kiarash que será liberada tras asistir a un «curso de formación»^[13].

El hermano insiste y los policías le rocían la cara con gas pimienta^[14]. Obligan a Mahsa a subir a la furgoneta, donde durante el trayecto, según testigos presenciales, es golpeada violentamente por las autoridades. Tras perder el conocimiento en el centro de detención^[15] de la avenida Vozara, ingresa en el hospital de Kasra en «Código 99», es decir, a punto de morir^[16]. Amini murió, de hecho, después de tres días en coma^[17].

Su familia y los manifestantes afirman que murió por las heridas sufridas durante la paliza policial. Las autoridades iraníes afirman que una primera investigación forense demuestra que murió de un fallo cardíaco o de un derrame cerebral^[18]. Diagnósticos muy improbables e inverosímiles en una mujer de tan sólo 22 años, hasta el punto de que su familia rechaza con vehemencia el atestado policial, alegando que Mahsa gozaba de buena salud en el momento de su detención^[19]. Las imágenes de la niña, tomadas en el hospital, muestran hematomas alrededor de ambos ojos y en las orejas, algo que ocurre tras un traumatismo grave. Hay otras mujeres, detenidas junto con Mahsa, que fueron puestas en libertad más tarde: se comprueban sus teléfonos para asegurarse de que nadie había tomado fotos o vídeos del incidente^[20].

Las protestas

Teherán, 24 de septiembre de 2022: Miles de iraníes en las calles para protestar contra el asesinato de Mehsa Amini^[21]

Su primo, Erfan Mortezaei, cuenta a CBS News^[22] cómo Mahsa se convirtió en la «voz de la ira del pueblo iraní». Él, activista político y combatiente peshmerga^[23] que vive exiliado en Irak, dice que la ambulancia tardó 30 minutos en llegar a ella y una hora y media en llegar al hospital. Un informe del hospital confirma que la muerte fue causada por un golpe en la cabeza. Mortezaei añadió que se presionó a la familia para que no hablara. Por último, subrayó que, al contrario de lo que dicen los medios de comunicación cercanos a los ayatolás, Amini no estaba interesado en la política^[24].

En respuesta a este asesinato, estallaron furiosas protestas en favor de los derechos de las mujeres, que se extendieron rápidamente a decenas de ciudades iraníes. Las mujeres salieron a la calle quemando pañuelos y cortándose el pelo en señal de rabia y desafío, enfrentándose a la policía, las milicias y las estrictas leyes sobre el hiyab, en lo que se ha convertido en el mayor desafío al régimen en años^[25]. Cortarse el pelo es un símbolo de luto. En algunos pueblos de Irán, hay árboles donde las mujeres que pierden a sus maridos en su juventud cuelgan sus cabellos trenzados y cortados^[26].

El ejército está dispuesto a aplastar la disidencia y no tiene reparos en enfrentarse a «los enemigos» que se esconden tras los disturbios^[27]. Las mujeres iraníes se convierten en símbolos del levantamiento: Hadis Najafi, de 20 años, filmada en un vídeo sin velo, se ata el pelo rubio teñido antes de unirse a las protestas por Mahsa Amini. La matan de seis balazos en el pecho, el cuello y el corazón, delante de todos, mientras grita «Mujer, vida, libertad»^[28]. Nika Shakarami, de 17 años, desaparecida hace unos días, fue encontrada muerta en la morgue por su familia. Su rostro habla de las palizas que recibió y que la mataron^[29].

La justicia iraní ordenó adoptar una línea dura contra los manifestantes, alegando que estaban dirigidos por agentes extranjeros y fomentados por los medios sociales antiiraníes^[30]. La IRGC, el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, ordena que se «dé una lección» a los manifestantes^[31]. El ministro de Justicia, Gholam Hossein Mohseni Ejei^[32], pide a las autoridades judiciales del país «una acción inmediata y disuasoria» contra los «grandes alborotadores y los revoltosos profesionales». Mohseni Ejei pide que se castigue a las personas que «dañan la propiedad pública, desobedecen a la policía y están vinculadas a servicios de inteligencia extranjeros»^[33].

La televisión estatal afirma que las protestas se organizan con el objetivo de crear disturbios, y que la muerte de Mahsa Amini está siendo utilizada como excusa por los separatistas kurdos. Catalizada por la violencia contra esta joven inocente, la disidencia en Irán revela la profunda ira de una nación que se resiente de décadas de opresión femenina a manos de un régimen teocrático^[34]. La respuesta del gobierno no se hace esperar. Durante su intervención en la 77ª Asamblea General de la ONU en Nueva York, el presidente iraní Seyyed Ebrahim Raisi^[35] , amigo de Vladimir Putin^[36] , mientras negocia el acuerdo nuclear, denuncia la parcialidad occidental, desviando las críticas de los líderes mundiales^[37]. Añade que ha ordenado una investigación sobre el caso de Mahsa Amini ^[38], pero lamenta el uso de un doble rasero: «Todos los días, en varios países, incluido Estados Unidos, vemos morir a hombres y mujeres en enfrentamientos con la policía, pero no hay conciencia de las causas de esta violencia»^[39].

La hija de Minoo Majidi ante la tumba de su madre^[40]

No habla del estado actual de su país, donde Internet, Instagram y Whatsapp están bloqueados^[41] por las autoridades, las mujeres queman sus hijabs en las calles y decenas de personas mueren al intensificarse las protestas contra el régimen^[42]. Durante una visita a Nueva York, Raisi pide a la periodista de la CNN Christiane Amanpour^[43] que lleve un pañuelo en la cabeza para una entrevista. Amanpour señala que ningún presidente anterior lo había solicitado. La entrevista sería la primera de Raisi durante su visita a la ONU. Sería: por qué el presidente no se presenta a la reunión^[44].

Bajo su gobierno, la policía de la moral amplía las patrullas en las calles. Las mujeres son abofeteadas, golpeadas con porras y arrojadas a los furgones de la policía por no llevar el hiyab «adecuadamente», dice un funcionario de derechos humanos de la ONU^[45]. Muchos han publicado imágenes de violentas agresiones policiales a personas que se manifiestan en las calles de las ciudades iraníes^[46]. Los vídeos de indignación pública y disidencia generalizada circulan por las redes sociales, mientras que testigos presenciales y grupos de derechos humanos afirman que las autoridades han reprimido duramente a los manifestantes con munición real, pistolas de perdigones y gases lacrimógenos^[47].

La mayor parte de los disturbios se concentran en el noroeste de Irán, de población kurda, pero se extienden a la capital y al menos a 50 ciudades^[48]. Un sentimiento de indignación surge de la ONU y de los ciudadanos de a pie^[49]. Estados Unidos anunció la flexibilización de las restricciones a la exportación para mejorar el acceso de los iraníes a Internet: «Se trata de un paso concreto para proporcionar un apoyo significativo a los iraníes que exigen el respeto de sus derechos fundamentales», dijo el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken^[50]. Italia también condena el asesinato de Mahsa. Estos días, en muchas ciudades, se está celebrando la «Concentración por la libertad de Irán» como muestra de solidaridad con la juventud iraní.

Se organizan procesiones y sentadas desde Roma hasta Tokio. Numerosas acciones de protesta: corte de mechones de pelo, consignas contra el gobierno iraní y a favor de la libertad de las mujeres^[51]. El campeón olímpico de 100 metros Marcel Jacobs^[52] se puso del lado de «todas las mujeres y hombres que protestan por su libertad»^[53]. La autora de Harry Potter, JK Rowling^[54], elogia a las mujeres iraníes por la valentía de sus protestas y comparte un clip que muestra a un policía golpeando a las mujeres con una porra^[55]. En las últimas horas ha circulado por la red otra foto: la de la hija de Minoo Majidi, una mujer que salió a la calle a protestar y fue bárbaramente golpeada por la policía. La hija se cortó el pelo y se quitó el velo para demostrar que su deseo de libertad, y el respeto al sacrificio de su madre, son mayores que el miedo^[56].

La periodista Christiane Amanpour espera en vano al presidente iraní Raisi^[57]

Las autoridades iraníes quieren impedir que los periodistas locales informen sobre las protestas^[58]. Ravina Shamdasani^[59] , portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, afirma que cientos de personas fueron detenidas, entre ellas defensores de los derechos humanos, abogados, activistas de la sociedad civil y al menos 18 periodistas. Entre ellos también la hija del ex presidente iraní Ali Akbar Hashemi Rafsanjani^[60], Fazeh Hashemi. La intransigente agencia de noticias Tasnim^[61], afiliada al Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos (CGRI)^[62], informó de que Hashemi fue detenido por las fuerzas de seguridad en el este de Teherán por «incitar a la revuelta»^[63].

Hashemi, de 69 años, es un antiguo periodista y activista de los derechos humanos. Su padre fue presidente de 1989 a 1997^[64]. Durante la votación presidencial del año pasado, que llevó al poder al intransigente Ebrahim Raisi, Hashemi estuvo entre los que llamaron a boicotear las elecciones. Culpó a las autoridades iraníes y a su política «errónea», que condujo a las sanciones estadounidenses, que afectan principalmente al pueblo iraní^[65].

La agencia Tasnim anunció que el Ministerio de Inteligencia iraní había detenido a nueve ciudadanos extranjeros de Alemania, Países Bajos, Polonia, Italia, Francia y Suecia, acusados de participar en las manifestaciones callejeras y de «trabajar entre bastidores» para fomentarlas^[66]. La agencia de noticias Irna^[67] afirma que 49 miembros del grupo Organización Mojahedin-e-Khalq (MkO)^[68], definido como terrorista por Teherán, fueron detenidos por difundir propaganda para incitar a los disturbios y suministrar material incendiario a los manifestantes^[69].

Los muertos en los disturbios son muchos, principalmente jóvenes. Las organizaciones no gubernamentales que supervisan la situación informan del elevado número de muertos, entre ellos mujeres y niños, y de los cientos de heridos que se han producido en las manifestaciones de al menos once provincias^[70]. Se informa de al menos 80 muertes, miles de detenciones de estudiantes, trabajadores, artistas, músicos…^[71] En el transcurso de la protesta se dañaron y quemaron muchos vehículos de la policía, y se arrancaron y destruyeron símbolos islámicos e imágenes^[72] del antiguo ayatolá Ruhollah Jomeini^[73]. Los activistas comparan esta situación con los disturbios de 2019, cuando más de 1.000 personas fueron masacradas^[74] protestando contra el aumento del precio de la gasolina^[75].

Las reglas de la policía moral

Los jugadores de la selección iraní llevan chalecos negros en el momento del himno nacional en protesta por las muertes de Mahsa Amini y Hadis Najafi^[76]

El recién elegido presidente Raisi firmó en agosto una ordenanza para aplicar una nueva lista de restricciones. Esto incluye la introducción de cámaras de vigilancia para controlar y multar a las mujeres sin pañuelo^[77]. Según el código de vestimenta, las mujeres en Irán deben cubrirse el pelo y llevar ropa larga y holgada. También están prohibidos los vaqueros rotos y los vestidos de colores vivos^[78]. Las normas son más estrictas para las mujeres que trabajan en organizaciones estatales o que se presentan a cargos públicos.

En la televisión estatal, las mujeres llevan dos capas de pañuelos para que no se vea ningún pelo suelto. Para entrar en las mezquitas, deben llevar el chador, una gran pieza de tela que sólo deja visible la cara o los ojos, según cómo se lleve. Los hombres tampoco son inmunes a los dictados, pero en mucha menor medida. El pelo largo o los peinados considerados excéntricos, así como el uso de pantalones cortos, vaqueros y camisetas, son ilegales, porque se cree que proceden de Occidente. Estas normas son aplicadas por la policía moral en los espacios públicos. La policía utiliza furgonetas blancas con rayas verdes y se sitúa principalmente en lugares frecuentados por jóvenes^[79].

Las furgonetas de tortura suelen estar tripuladas por un equipo mixto de hombres y mujeres para garantizar una vestimenta y un comportamiento reservados en público. Después de pasar por una comisaría, las detenidas son llevadas a un «centro de corrección o reeducación», donde se les enseña a vestirse «correctamente». Por lo general, son liberados el mismo día, después de que un familiar les traiga ropa «adecuada»^[80].

La policía de la moral surgió y adoptó el nombre persa de Gasht-e Ershad, que significa patrulla dirigida por los islámicos^[81], bajo el ultraconservador ex presidente Mahmud Ahmadineyad^[82] , un feroz opositor a Occidente y partidario, entre otras cosas, de las inversiones en el programa nuclear^[83]. Tras la llegada al poder de Ahmadineyad en 2005, la policía de la moral fue renovada y aumentó su presencia en las grandes ciudades^[84]. Una burla atroz, porque la historia de Irán, incluso durante la monarquía, es muy diferente:^[85] antes de la revolución islámica de 1979^[86], las mujeres del país gozaban de derechos similares a los de los hombres^[87].

Cuando el ayatolá Ruhollah Jomeini llegó al poder, la policía de la moral tomó el control de la vida de las personas, especialmente de las mujeres^[88]. Un proceso de islamización forzosa, una represión de las libertades individuales y de las costumbres, especialmente de las mujeres, que está a la vista de todos. Una esquizofrenia social que provoca el sufrimiento clandestino de millones de personas, jóvenes en particular, que estudian y viajan por el mundo, y que se ven obligados a someterse a restricciones arcaicas^[89].

Una imagen de las protestas en Teherán^[90]

Restricciones que violan los derechos humanos, la libertad de expresión, los derechos de las mujeres, las personas lgbtqi+, las minorías étnicas y religiosas^[91]. Todo porque el poder busca chivos expiatorios para su propia incapacidad de dirigir la nación. No es casualidad que precisamente en el momento en que más se siente la crisis económica, las sangrientas muertes de Mahsa, de Najafi, de Nika, de los que protestan, hayan encendido la mecha de un barril de pólvora que lleva 43 años en peligro de estallar. Los iraníes no piden venganza, exigen el derecho a vivir en libertad, en un régimen laico donde la política y la religión están claramente separadas.

Es difícil creer que lo consigan. Vivimos en una época en la que los cuadros dirigentes de la política y la economía son totalmente inadecuados, y no pueden resolver (ni siquiera abordar conscientemente) los enormes problemas a los que nos enfrentamos: la emergencia climática; la destrucción de las clases medias que, a su vez, trae consigo una crisis casi irreversible del capitalismo; la espantosa degeneración de los sistemas de educación y de acceso a la cultura, que trae consigo una total falta de conciencia de la propia corresponsabilidad en la defensa y el ejercicio de la democracia; el hecho de que los únicos sectores de crecimiento sean los militares que, para seguir creciendo, necesitan la guerra, la muerte y la destrucción.

Durante décadas, la identificación del enemigo, culpable de todo, ha sido sencilla. En la época del nacionalsocialismo, eran los judíos, y luego, según el lado del mundo en el que estuvieras, los contrarrevolucionarios y derrotistas, o los comunistas. Cuando eso tampoco funcionó, el nuevo enemigo se identificó en los extranjeros, especialmente los de etnia y religión diferentes. Esto ya no es suficiente. Ahora es el momento en que las mujeres serán culpadas. A Eva, que comió la manzana que nos costó el Paraíso. Después de eso, se necesitará muy poco para extinguir la vida en el planeta, y acabar con la raza humana, que tanto ha hecho para destruirse a sí misma.

^[1] Otto, Jan Michiel, “Sharia Incorporated: A Comparative Overview of the Legal Systems of Twelve Muslim Countries in Past and Present”, Leiden University Press 2010

^[2] https://www.ilpost.it/2021/08/19/sharia-legge-islamica/

^[3] https://impakter.com/women-of-iran-say-killings-after-killings-to-hell-with-morality-police/

^[4] https://www.corriere.it/esteri/22_settembre_25/iran-hadis-najafi-20-anni-uccisa-sei-proiettili-mentre-manifestava-mahsa-amini-5cd33432-3cc5-11ed-823a-d6cc1a3a6eda.shtml

^[5] https://www.firstpost.com/explainers/explained-gasht-e-ershad-irans-controversial-morality-police-accused-of-mahsa-aminis-death-11304741.html

^[6] https://www.theguardian.com/world/2022/sep/23/iran-reportedly-arrests-journalist-activist-mahsa-amini-protests

^[7] https://www.firstpost.com/explainers/explained-gasht-e-ershad-irans-controversial-morality-police-accused-of-mahsa-aminis-death-11304741.html

^[8] https://www.theguardian.com/world/2022/sep/23/iran-reportedly-arrests-journalist-activist-mahsa-amini-protests

^[9] https://www.thesun.co.uk/news/19829569/young-woman-beaten-death-iran-morality-police-hijab/

^[10] https://www.aljazeera.com/news/2022/9/23/iran-morality-police-root-cause-iranian-protest-anger-explainer

^[11] https://impakter.com/women-of-iran-say-killings-after-killings-to-hell-with-morality-police/

^[12] https://www.rainews.it/articoli/2022/09/iran-il-cugino-di-mahsa-amini-torturata-e-insultata-78d17ca5-4a84-421b-a2f1-81b7ec90dc8c.html

^[13] https://impakter.com/women-of-iran-say-killings-after-killings-to-hell-with-morality-police/