Kissinger, centenario, es recibido por el gobierno chino como un viejo socio con el que se ha recorrido un largo y tortuoso camino. De hecho, el camino común del siglo XX entre EEUU y China se construye sobre los esfuerzos del entonces Consejero de Seguridad Nacional durante la primera administración Nixon.
En 1969, los gobiernos de ambos países llevaban veinte años sin hablarse, pero se estaba preparando el terreno para un acercamiento: en las crecientes tensiones entre la Unión Soviética y la República Popular, Washington entró con abiertas declaraciones de neutralidad, al tiempo que advertía a los contendientes de que no debían emprender acciones militares. Las negociaciones entre ambos países comenzaron en febrero de 1970, durante las cuales la Casa Blanca aseguró repetidamente al gobierno chino que en ningún caso apoyaría a la Unión Soviética contra China, juzgando a ambos no por sus respectivas ideologías sino por sus acciones[1] .
La Realpolitik de Kissinger y Nixon no tardó en dar sus frutos: la Unión Soviética y China leyeron en el planteamiento neutralista de Estados Unidos una cálida invitación a no exacerbar los ánimos, cultivando con ellos relaciones de buena vecindad y cuidando, por tanto, de no amenazar los intereses vitales de los norteamericanos[2] . Tras una breve serie de conversaciones entre emisarios gubernamentales que comenzó en Varsovia en diciembre de 1969, Kissinger partió en secreto hacia Pekín en julio de 1971; la razón del éxito de aquella primera serie de conversaciones directas con Mao Tse Tung y el resto de la dirigencia china residió en la búsqueda común por parte del dúo Nixon/Kissinger y la otra parte de colaborar sin dar excesivo peso a oposiciones ideológicas o cuestiones de orgullo nacional.
El gobierno chino busca más garantías de Washington de que no cooperará con el Kremlin en la aplicación de la doctrina Brezhnev, conocida como la doctrina de la soberanía limitada, que amplía los poderes de intervención de la Unión Soviética sobre los países del Pacto de Varsovia, justificando así la invasión de Checoslovaquia en agosto de 1968[3] . Nixon necesita saber si Pekín está dispuesto a cooperar con Estados Unidos para obstaculizar las ofensivas geopolíticas soviéticas. Sobre esta base, las futuras conversaciones entre Nixon y Mao, entre Kissinger (desde 1973 secretario de Estado) y Zhou Enlai -jefe del gobierno de la República Popular- producen la desvinculación de China de los intereses estadounidenses en el sudeste asiático, con especial referencia a Vietnam y Camboya, pero también a la cuestión de Taiwán.
Pekín centra sus intereses en la amenaza soviética y, en menor medida, en la japonesa. En febrero de 1972, Nixon firmó el Comunicado de Shanghai, una hoja de ruta para el desarrollo de las relaciones sino-estadounidenses en la década siguiente: aunque la mayor parte del documento reafirmaba la divergencia invariable de puntos de vista entre las dos potencias en cuanto a ideología, asuntos internacionales, Vietnam, Taiwán, se hacía gran hincapié en los puntos de interés común: la normalización de las relaciones entre los dos países, la reducción del peligro de un conflicto militar internacional, la no voluntad de hegemonizar el sudeste asiático y la garantía de no negociar acuerdos en nombre de terceros países[4] .
Como la Unión Soviética era el único país capaz de dominar Asia, esta alianza podía poner freno a cualquier propósito expansionista de Moscú. En el plazo de un año, se creó así una estructura de paz basada en la convicción del entorno de Nixon de que mientras China temiera más a los soviéticos que a los estadounidenses, mantendría la cooperación con estos últimos. La alianza sino-estadounidense indujo a su vez a la Unión Soviética a iniciar un proceso de distensión con Estados Unidos, que ya había comenzado en el verano de 1972 con la invitación de Nixon a Moscú[5] .
11 de noviembre de 1985: una de las reuniones, en Pekín, entre Henry Kissinger y Deng Xiaoping.[6]
Hoy, cincuenta años después, Henry Kissinger es tan apreciado y respetado en China por la prensa como por el Gobierno, hasta el punto de que, tras su reunión de 2019 en Pekín con Xi Jinping[7] , estos días se encuentra de nuevo en la capital para mantener una serie de encuentros con el ministro de Defensa, Li Shangfu, y el director de la Oficina Central de Exteriores del PCCh, Wang Yi. Ambos tienen palabras de gran estima para el trabajo de Kissinger en la construcción de relaciones con EEUU, al tiempo que muestran poca estima por la actual administración estadounidense[8] .
Aunque el anciano estadista se encuentra oficialmente de visita privada, es posible especular sobre su participación en el gabinete de Biden con la esperanza de que su intervención facilite la hasta ahora infructuosa labor del gobierno estadounidense para mejorar las relaciones con Pekín: el mes pasado, el propio Li se negó a reunirse con el secretario de Defensa, Lloyd J. Austin III, en un encuentro en Singapur. Austin III[9] , los días 18 y 19 de junio el Secretario de Estado Anthony Blinken se reúne en Pekín con Xi Jinping, Wang Yi y el Ministro de Asuntos Exteriores Qin Gang[10] , a principios de julio fue el turno de la Secretaria del Tesoro Janet L. Yellen[11] , que se reúne con el viceprimer ministro y director de la Comisión Central de Asuntos Financieros y Económicos, He Lifeng[12] ; el 20 de julio, John Kerry, enviado especial del Gobierno estadounidense para el clima, también llega a Pekín en busca de una hoja de ruta para que China se implique más en la lucha contra el cambio climático[13] , pero el camino para la Administración Biden parece cuesta arriba después de que las relaciones entre ambos países alcanzaran su punto más bajo durante la presidencia de Trump.
A pesar de sus esfuerzos, para los chinos, hace cincuenta años como hoy, los hechos son más importantes que las palabras: no les ayuda, en este sentido, la actitud del presidente estadounidense sobre la cuestión de Taiwán, que Washington amenaza con apoyar militarmente en caso de ataque chino[14] , ni la imposición de controles a la exportación de ciertos microchips estadounidenses utilizados para el desarrollo de la inteligencia artificial[15] . Parece, por tanto, que para recuperar la credibilidad perdida a lo largo de los años, es necesario que Estados Unidos recurra, en este contexto, al tacto, la sagacidad sin parangón y el sentido de la Realpolitik de un centenario relegado a la historia como criminal de guerra, es el camino más corto[16] .
Los chinos saben muy bien, como también deberían recordarlo los italianos, que cuando se trata de defender los intereses estadounidenses en el extranjero, todo vale: un golpe de Estado en Chile, una serie de sangrientos atentados parafascistas en Italia, apoyo a dictaduras monstruosas en Extremo Oriente, acuerdos con las monarquías teocráticas más feroces de Oriente Próximo. Kissinger lleva casi un siglo escribiendo la historia de esta actitud de Estados Unidos. Quién sabe si también está escribiendo el próximo capítulo.
[1] «Nixon Papers», Segundo informe anual, 1971
[2] H. Kissinger, «Diplomacy», Simon & Schuster, 1994
[3] http://leg13.camera.it/_dati/leg13/lavori/doc/xxiii/064v01t04_RS/00000017.pdf
[4] Comunicado conjunto emitido en Shanghai, 27 de febrero de 1972, en State Bulletin, vol. LXVI, No. 1708, 20 de marzo de 1972. LXVI, No. 1708, 20 de marzo de 1972
[5] H. Kissinger, «Diplomacy», Simon & Schuster, 1994
[6] https://www.lastampa.it/blogs/2011/05/11/news/kissinger-sdogana-mao-br-ha-cambiato-il-paese-1.37268717/
[7]https://www.fmprc.gov.cn/mfa_eng/gjhdq_665435/3376_665447/3432_664920/3435_664926/201911/t20191126_590854.html
[8] https://www.nytimes.com/2023/07/18/world/asia/kissinger-china-defense.html
[9] https://www.nytimes.com/2023/07/18/world/asia/kissinger-china-defense.html
[10] https://www.state.gov/secretary-blinkens-visit-to-the-peoples-republic-of-china-prc/#:~:text=Blinken%20viajó%20a%20Pekín%2C%20la,Pandilla%20desde%20junio%2018%2D19.
[11] https://home.treasury.gov/news/press-releases/jy1603
[12] https://www.bbc.com/news/world-asia-66146889
[13] https://www.reuters.com/world/us-envoy-kerry-says-china-climate-talks-constructive-complicated-2023-07-19/
[14] https://www.nytimes.com/2022/11/10/us/politics/biden-xi-china-taiwan.html
[15] https://www.wsj.com/articles/u-s-considers-new-curbs-on-ai-chip-exports-to-china-56b17feb
[16] https://ibiworld.eu/en/henry-kissinger-the-dark-soul-of-the-20th-century/
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