Su nombre infunde respeto y admiración en al menos cinco generaciones de políticos, militares y empresarios: Henry Kissinger, asesor de presidentes, premio Nobel de la Paz en 1973 (por decidir el fin de la guerra de Vietnam que él mismo había contribuido a desencadenar), cumplirá 100 años en 2023. Un siglo en el que ha estado en el centro de la historia mundial, pero no sólo por su papel como Secretario de Estado de los Estados Unidos. La parte más importante de la carrera de Kissinger comenzó al final de la Segunda Guerra Mundial cuando, como agente de inteligencia militar en Alemania, reclutó a muchos jerarcas nazis (y ayudó a otros a desaparecer) en las filas de empresas, laboratorios científicos, el ejército y el espionaje estadounidense.
Su biografía «olvidada» habla de cómo, a partir de 1944, trabajó pacientemente en la organización de ejércitos secretos, golpes de Estado, asesinatos y vínculos entre el gobierno estadounidense, sus lobbies más poderosos (y más reaccionarios), el neofascismo y el neonazismo europeos, la masonería, el Vaticano e incluso la mafia. La justificación de este plan que ha costado incalculables muertes: enfrentar al socialismo y al comunismo, en todas partes, a cualquier precio. Kissinger, hijo de una familia judía que escapó de las persecuciones de Hitler, se convirtió en el hombre que contribuyó a la supervivencia del patrimonio y del capital humano que fue derrotado en 1945, convirtiéndose así en el alma negra del nuevo orden mundial, que recién ahora se está desmoronando para convertirse, probablemente, en algo aún más temible.
Este largo artículo explica detalladamente sus amistades, sus alianzas, sus decisiones, sus intrigas: allí encontrará los nombres más temibles de la historia de la humanidad del siglo XX. Y él, siempre él, en medio, coordinando los esfuerzos de más de medio siglo de sangriento imperialismo americano.
Elegir a los mejores nazis: Kissinger en la Segunda Guerra Mundial
Los hermanos Kissinger, Walter y Henry, de visita en su ciudad natal en Baviera en 2019[1]
Nuestra historia comienza y termina en el sur de Alemania: Fürth es una pequeña ciudad del centro-norte de Baviera que, junto con Núremberg y Erlangen, forma la principal aglomeración de la Franconia Media[2]. Su centro histórico sobrevivió milagrosamente a la devastación de la Segunda Guerra Mundial, por lo que hoy en día todavía es posible admirar el antiguo ayuntamiento, que fue construido a mediados del siglo XIX a imagen y semejanza del Viejo Ayuntamiento[3].
En la década de 1920, Falk Stern era un rico comerciante de ganado y miembro de la burguesía judía ortodoxa de Fürth; cuando su hija Paula se casó con el profesor Louis Kissinger, les ayudó a comprar su primera casa[4]. Aquí, el 27 de mayo de 1923, nació el hijo mayor de la pareja, Heinz Alfred Kissinger[5]; la vida del joven Heinz transcurrió (junto con la de su hermano Walter) cultivando la pasión por el fútbol[6] y la lectura, hasta el ascenso de Hitler al poder. A partir de 1933 la situación cambia radicalmente: Louis pierde su trabajo, mientras que a Heinz (el futuro Henry) y a Walter les resulta cada vez más difícil llevar una existencia adolescente normal, experimentando la segregación en primera persona[7].
Tras la promulgación de las infames Leyes de Núremberg (1935) [8], los Kissinger empezaron a buscar la manera de salir de Alemania; gracias al apoyo financiero de un pariente que vivía en EE.UU., en agosto de 1938 la familia emigró en dirección a Nueva York[9], tres meses antes de la Noche de los Cristales (9 y 10 de noviembre) [10], en la que se destruyeron o dañaron más de 1000 sinagogas y 7500 negocios gestionados por judíos en toda Alemania, así como hospitales, escuelas, cementerios y hogares; unos 30.000 hombres judíos de entre 16 y 60 años son detenidos y llevados a los campos de concentración de Dachau, Buchenwald y Sachsenhausen[11].
Tras dos años en el Bronx, los Kissinger encontraron alojamiento en el barrio de Washington Heights[12], también conocido como el «Cuarto Reich» por el gran número de ciudadanos alemanes (principalmente judíos) que vivían allí[13]. En los años siguientes, Henry trató de construirse una vida social, logrando graduarse e inscribirse en el City College local, donde asistía a clases nocturnas y trabajaba durante el día en una fábrica de cepillos[14]. En enero de 1943, con casi 20 años, Henry Kissinger es uno de los 16 millones de hombres que reciben la llamada a las armas[15]. Lo que para muchos es una maldición, para Kissinger es una oportunidad: advertido por sus superiores en el Centro de Entrenamiento de Reemplazo de Infantería de Spartanburg (Carolina del Sur) por las altas puntuaciones que obtuvo en algunas pruebas, es asignado al Programa de Entrenamiento Especializado del Ejército (ASTP), un programa creado para enviar a la universidad a los soldados con más talento. Es enviado por la ASTP a estudiar ingeniería en el Lafayette College (Pensilvania), cerca de su casa en Nueva York[16]. Se convirtió en ciudadano estadounidense el 19 de junio de 1943[17].
Cuando la necesidad de tropas de Europa llevó al Ejército a cerrar el ASTP, Kissinger fue enviado a la 84ª División de Infantería en Camp Claiborne (Luisiana) y, tras varios meses de entrenamiento, llegó a Alemania el 2 de noviembre de 1944[18]. Mientras muchos de sus compañeros toman el fusil, Kissinger, que habla alemán como lengua materna, es destinado a la sección G-2 (Inteligencia) del mando de la división, convirtiéndose más tarde en agente especial del CIC (Cuerpo de Contrainteligencia) [19]; durante la batalla de las Ardenas (16 de diciembre de 1944 / 25 de enero de 1945[20]). Kissinger trabajó de forma encubierta en la ciudad belga de Marche-en-Famenne[21], interrogando a los prisioneros de guerra e identificando a los espías enemigos[22].
El sargento Henry Kissinger y su mentor Fritz Kraemer con las tropas americanas en las Ardenas (1944)[23]
En este contexto, es crucial su relación con Fritz A. Kraemer: aristócrata alemán que huyó de Alemania en 1933, tras completar sus estudios en Italia, fue a Estados Unidos en 1939, se alistó en el ejército después de Pearl Harbour y fue destinado por el general Alexander R. Bolling al cuartel general de la 84ª División. Como alemán no judío que decidió abandonar su país en abierta oposición a la ideología de Hitler, Kraemer se hizo un hueco en la Inteligencia Militar, llegando a ser conocido en el entorno por sus conferencias a los soldados sobre la naturaleza degenerada de la ideología nazi.
Durante una de estas conferencias fue escuchado por el joven Kissinger de 21 años, quien le escribió una carta para transmitirle la importancia que sus palabras habían despertado en él; así nació una larga asociación, destinada a tener una influencia decisiva en la vida de Kissinger[24]. En Alemania, Kraemer le consigue el puesto de intérprete del general Bolling y, como sargento de la unidad de contraespionaje del 84º[25], favorece su inclusión en la lista de administradores de la ciudad de Krefeld, ocupada el 2 y 3 de marzo de 1945[26].
Según el Manual de Procedimientos de Seguridad Pública del SHAEF, Gobierno Militar para Alemania, la tarea de seleccionar a los administradores locales para restablecer el funcionamiento de la máquina pública alemana se asigna a los departamentos especiales de la unidad de seguridad pública del gobierno militar; en ausencia de estas unidades, en Krefeld son los oficiales del CIC los que se ocupan de la contratación y el despido; Kissinger se encuentra entre ellos, aunque su papel nunca se ha aclarado del todo. En esta coyuntura, por sus cualidades intelectuales y su conocimiento cultural y lingüístico del país ocupado, puede haber hecho una importante contribución al traducir los documentos que los nazis no habían podido destruir antes de la huida[27].
Después de participar en la liberación del campo de concentración de Ahlem[28], Kissinger, ahora miembro del CIC con el rango de sargento[29], llegó con su división a Hannover en abril de 1945; aquí, el CIC le encargó que expulsara a los nazis y a los miembros de la Gestapo, tarea en la que se distinguió por explotar su conocimiento del carácter, la obediencia y el orgullo alemanes. Por esta misión recibe la Estrella de Bronce[30]. Sus servicios en Krefeld y Hannover le valieron el puesto de comandante del distrito de Bergstraße en Bensheim, Hesse.
La tarea del CIC es proteger a las fuerzas estadounidenses del espionaje, el sabotaje y la subversión, deteniendo a miembros de las SS, del SD (Sicherheitsdienst des Reichführers-SS, la agencia de espionaje de las SS y del partido nazi[31]) y a algunos miembros del partido nazi; al mismo tiempo, los miembros del Cuerpo de Contrainteligencia detienen a oficiales del Estado Mayor alemán en centros especiales de interrogatorio y ayudan a buscar a los mejores científicos para que sus servicios sean útiles a la causa estadounidense[32]. Kissinger (Equipo CIC 970-59[33]), comandante del destacamento con sede en Bensheim, se convierte en el gobernante absoluto de la ciudad: se desplaza en un Mercedes blanco confiscado a un nazi y reside en una mansión de los años 30 (también confiscada) en un suburbio de alto rango y, sobre todo, tiene más poder que el gobierno militar, que incluye la facultad de arrestar libremente a las personas[34].
En abril de 1946, el ejército trasladó a Kissinger de Bensheim a Oberammergau, una pequeña ciudad en los Alpes bávaros, donde se encontraba la Escuela de Inteligencia del Mando Europeo de los Estados Unidos[35]; allí conoció a Kraemer, uno de los fundadores del instituto, que quería que trabajara allí como instructor para educar a los soldados sobre la sociedad alemana, para rastrear mejor a los nazis y restaurar el funcionamiento de las instituciones civiles[36]. Entre los alumnos de Kissinger estaban el futuro profesor de Harvard Henry Rosovsky[37] y Helmut Sonnenfeldt, asistente de Kissinger en el Consejo de Seguridad Nacional (1969-74) y en el Departamento de Estado (1974-77)[38].
El Cuartel General de EE.UU. en Bensheim, donde Kissinger sirvió de 1945 a 1946[39]
La proximidad de Oberammergau a varios escondites en las montañas de los nazis que huían permitió a los agentes de contrainteligencia militar capturar, entre ellos, a varios elementos considerados valiosos para Estados Unidos, organizando su traslado a territorio americano, donde pasarían a formar parte de las fuerzas de defensa de la posguerra; el más famoso de estos traslados es el de Wernher von Braun: bajo el régimen nazi, es una de las principales figuras del programa de desarrollo de misiles, que en Estados Unidos, junto con otros eminentes científicos alemanes, contribuyó de forma esencial al desarrollo de los programas de misiles durante los siguientes veinte años[40], incluido el Apolo[41].
Kissinger y Kraemer están al tanto de estas actividades[42], conocidas como Operación Paperclip: más de 1.500 científicos y técnicos con sus familias son trasladados en secreto a Estados Unidos[43], bajo la dirección del abogado de la familia Rockefeller, Allen Welsh Dulles[44], quien al mismo tiempo contrata a Reinhard Gehlen, un antiguo espía al servicio del Führer, para enrolar a veteranos de las SS y la Gestapo en una nueva agencia secreta, la Organización Gehlen (el propio Gehlen se convertirá más tarde en director del BND, el servicio secreto de Alemania Occidental), financiada por Estados Unidos, que actúa de forma concertada con la recién creada CIA[45], dejando que los ex nazis creen estructuras secretas como Odessa[46] y Die Spinne[47] (la araña). Estas redes conducen a la Ratline, una ruta de escape a Argentina (con documentos falsos proporcionados por Gehlen y la CIA) para miles de criminales de guerra nazis buscados por Israel, Rusia, Francia y otros países[48]. Entre los colaboradores de Gehlen destaca el nombre de Youssef Nada, que desde Tánger organizó los viajes en barco y los pasaportes falsos para los jerarcas huidos[49] y, muchos años después, estaría implicado, con su Banco Al-Taqwa, en las investigaciones sobre la financiación del atentado del 11 de septiembre contra las Torres Gemelas de Nueva York[50].
Entre ellos se encontraban figuras tan notables como Adolph Eichmann, el tristemente célebre Dr. Joseph Mengele, Otto Skorzeny[51], Walther Rauff, Friedrich Schwend y Klaus Barbie, todos los cuales trabajaron para la CIA-BND como asesores de los dictadores de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Bolivia, dirigiendo centros de tortura, escuadrones de la muerte y redes de cocaína[52] como parte de la Operación Cóndor[53]. En 1947 Henry Kissinger trabajó como traductor de alemán en la Inteligencia Militar, ayudando a Dulles a establecer estas redes secretas a través de los interrogatorios a los principales prisioneros nazis detenidos por el ejército estadounidense, posteriormente absorbidos por la CIA-BND[54].
Barbie, Schwend y Skorzeny trabajaron inicialmente para el CIC junto con Kissinger[55], y fueron financiados por éste, en Sudamérica, para crear y dirigir un grupo de empresas dedicadas al tráfico de armas y de drogas: El grupo La Estrella SA, con sede en Perú (Friedrich Schwend) y sucursales en Argentina (Willem Sassen), Bolivia (Klaus Barbie), Ecuador (Alphons Sassen) y Paraguay (Hans Ulrich Rudel) [56], todos ellos oficiales nazis a sueldo del CIC primero y de la CIA después[57]. Las armas, distribuidas a los Escuadrones de la Muerte en los países latinoamericanos, procedían del comerciante alemán Gerhard Georg Mertins y su grupo MEREX, activo en las operaciones exteriores de las SS incluso durante la Segunda Guerra Mundial[58]. Walther Rauff, en Colonia Dignidad, era el responsable del entrenamiento de los mercenarios que participaban en los Escuadrones de la Muerte[59].
Otto Skorzeny fue enviado por Hitler para liberar a Benito Mussolini, encarcelado en los Abruzos, y fue quien organizó la red de espionaje de la República de Salò después del 8 de septiembre de 1943, red para la que trabajaban el joven fascista italiano Licio Gelli[60] y algunos nazis españoles[61]. Unos meses más tarde, Gelli y Skorzeny organizaron la huida a Argentina de Herbert Kappler, el oficial nazi que ordenó la masacre del Fosse Ardeatine para vengar el ataque partisano de la Via Rasella en Roma[62]. Al final de la guerra, y en los meses siguientes, Skorzeny y Gelli trabajaron para el CIC al igual que Kissinger, en una red de espionaje dentro de la cual creció el terrorista neofascista Stefano Delle Chiaie[63], fundador de Avanguardia Nazionale[64], que luego trabajaría para Gelli y la CIA en Italia, Argentina y Chile, contribuyendo con acciones terroristas a la llamada estrategia de la tensión[65].
Propaganda y tortura contra el socialismo: Kissinger en los años 50
12 de septiembre de 1943: el oficial de las SS Otto Skorzeny junto a Benito Mussolini, a quien acababa de liberar[66]
En julio de 1947 Kissinger regresó a Estados Unidos: fue aceptado en Harvard, donde conoció a William Y. Elliott, el segundo gran mentor de su juventud. Elliott es un legendario profesor de historia y ciencias políticas, ferviente anticomunista, que en sus treinta y ocho años dirigió las tesis doctorales de futuros políticos de primera fila, como Pierre Elliott Trudeau (primer ministro canadiense, padre de Justin, que también llegó a ser premier), Ralph J. Bunche (premio Nobel de la Paz en 1950 y subsecretario general de las Naciones Unidas). Como su tutor en el Departamento de Gobierno de Harvard, Elliott introdujo a Kissinger en el estudio de la filosofía europea (Homero, Spinoza, Kant, Hegel)[67], apreciando en su protegido, como Kraemer, un gran sentido de la historia como panacea contra el nihilismo y el conformismo, así como un conjunto de instrucciones para la acción futura[68].
A finales de la década de 1940, Elliott fue director de personal de la Comisión de Asuntos Exteriores y Ayuda Exterior de la Cámara de Representantes; también fue miembro de la Junta de Planificación Política del NSC (Consejo de Seguridad Nacional)[69]. Cercano a Richard Nixon desde finales de la década de 1950, escribió los discursos de la campaña que el propio Nixon perdió por poco ante Kennedy en 1960, y posteriormente fue un alto asesor en el Departamento de Estado bajo los presidentes Kennedy y Johnson[70]. Decano de la Escuela de Verano de Harvard de 1950 a 1960[71], Elliott apoyó a Kissinger hasta el punto de ponerle al frente de un proyecto que marcó indeleblemente la carrera del joven: el Seminario Internacional.
Kissinger lo concibió como una oportunidad para los europeos brillantes que, por razones económicas y de guerra, no habían tenido la oportunidad de conocer los Estados Unidos, a través de la cual podrían conocer la mejor cara de los Estados Unidos en un momento en el que había una fuerte necesidad de alejar el mayor número posible de mentes prometedoras del comunismo[72]. Tras el primer seminario, en 1951, Kissinger y Elliott fundaron Confluence, un periódico que dio voz a las reivindicaciones y debates que surgieron durante el evento[73].
A través de Confluence, el nombre de Kissinger llega por primera vez a las páginas del New York Times[74]; a lo largo de los años, a los europeos se suman estudiantes de África, Asia y América Latina, aumentando la resonancia del debate generado por los seminarios. La revista adquirió una notoriedad impensable para una publicación académica, reuniendo contribuciones de destacadas figuras políticas y culturales como McGeorge Bundy, Hannah Arendt, André Malraux, Alberto Moravia y Denis Healey[75]. La búsqueda de fondos para mantener vivo el proyecto ocupó la mayor parte del tiempo de Kissinger en ese momento. El dinero necesario procedía, entre otros, de la universidad y de las fundaciones Ford y Rockefeller.
En 1967, nueve años después del cierre de Confluence, se descubrió que la CIA se encontraba entre los principales financiadores del periódico y del Seminario Internacional[76]: en 1953, un grupo llamado Friends of Middle East comenzó a hacer donaciones por un total de algo menos de 250.000 dólares. Kissinger siempre ha negado conocer la mano de la CIA detrás de Friends of the Middle East[77]. La Fundación Farfield y otras asociaciones también fueron vehículos de la financiación continua de la CIA, que así apoyó económicamente el largo proyecto del Seminario, un ejemplo de que la Guerra Fría Cultural contribuyó a la creación de una identidad cultural común, al tiempo que proporcionó a Kissinger valiosa información sobre los aliados de Estados Unidos, hecho que aumentó su prestigio[78].
Noviembre de 1958: Henry Kissinger y McGeorge Bundy (en el centro de la primera fila) en una foto de grupo de los miembros del Centro de Asuntos Institucionales de Harvard[79]
Como director del Seminario Internacional, en 1952 Kissinger realizó un nuevo viaje a Alemania, donde Confluence se distribuyó (en virtud de una donación específica de la Fundación Rockefeller) en universidades, sedes de partidos y en las librerías más importantes[80]. Shepard Stone, antiguo periodista, miembro de la inteligencia militar estadounidense en Alemania durante la guerra, director adjunto de Asuntos Públicos para la Alemania ocupada desde 1949, a partir de 1952 fue director de Asuntos Internacionales de la Fundación Ford, trabajando estrechamente con la CIA para desarrollar proyectos culturales en todo el mundo[81]. Stone animó a Kissinger a continuar con el acercamiento del periódico a las élites intelectuales europeas[82].
Tras ese viaje, el PSB (Psychological Strategy Board) encargó a Kissinger la redacción de un informe que sirviera de base para los trabajos del comité, destinado a inmunizar a Alemania Occidental contra los efectos de la propaganda soviética, asegurando al mismo tiempo la alineación duradera del país con la política común occidental[83]. Activo de 1951 a 1953, el PSB era un comité en funciones bajo la égida del Consejo de Seguridad Nacional (NSC) con la tarea de coordinar los programas y las operaciones con la CIA, el Departamento de Estado de EE.UU., ciertas ramas de las Fuerzas Armadas y otras agencias involucradas en la guerra psicológica[84]. El trabajo de la RSP como maquinaria de propaganda gubernamental refleja la urgencia de no sólo confiar en la red de relaciones internacionales para preservar o cambiar una situación política internacional, sino de actuar presionando a las masas[85].
Las conexiones del comité con los infames proyectos ilegales de la CIA que se remontan a principios de los años 50 (Bluebird, Artichoke y Mkultra)[86], cuyo objetivo era el control mental de los individuos mediante el uso de drogas y torturas, llevando a las víctimas a confesar en una primera fase de interrogatorio; la segunda fase de este tratamiento implica la anulación de la voluntad de las víctimas, convirtiéndolas en asesinos involuntarios, herramientas privadas incluso del instinto de conservación[87]. La CIA de Allen Welsh Dulles, director de la Agencia en esa época, desarrolla estos proyectos con científicos nazis pertenecientes a la Organización Gehlen, continuando de hecho el trabajo que realizaban en la época del Tercer Reich en función antialiada[88].
La RSP fue creada en abril de 1951 por el presidente estadounidense Harry S. Truman, y estaba formada por el Subsecretario de Estado, el Subsecretario de Defensa y el Director de la CIA (Directiva Presidencial del 4 de abril de 1951)[89]. Con EE.UU. al frente de las fuerzas de la ONU en Corea, el propósito del comité es evitar el desarrollo de rivalidades entre las agencias que participan en las operaciones psicológicas[90]. Kissinger es uno de los asesores del RSP[91]. Su informe para la comisión aparece muy pesimista sobre el estado de las relaciones entre Estados Unidos y Alemania, la unidad espiritual de Occidente y la capacidad de regeneración moral de Alemania, percibiendo a los soviéticos y a los estadounidenses como las dos caras de una misma moneda, advirtiendo que el poder de influir en los acontecimientos en un país clave para los esfuerzos de Estados Unidos en Europa se escapa rápidamente de las manos de Estados Unidos; también como resultado de las palabras de Kissinger, el RSP aprueba la creación de un Plan de Estrategia de Psicología Nacional específico para Alemania, que se integrará en el plan general para Europa[92].
Kissinger, en su libro «Nuclear Weapons and Foreign Policy» (1957) [93], hace una severa crítica a la pasividad política de Estados Unidos frente a las posiciones soviéticas en el tema de los estados satélites, la reunificación alemana y el control de armas, permitida por los anuncios de Estados Unidos de no usar la fuerza salvo en respuesta a una agresión[94]. Refiriéndose especialmente a la situación alemana, Kissinger acusó a su propio gobierno de no considerar la cuestión de la defensa europea como un problema psicológico, sino sólo técnico, negando su apoyo al proceso de reunificación, lo que podría llevar a Alemania Occidental a escuchar las propuestas de Moscú[95].
18 de julio de 1951: Gordon Gray (a la derecha) jura su cargo ante el presidente Harry Truman (a la izquierda) como director del centro de tortura de la Junta de Estrategia Psicológica, con el que colaboró Henry Kissinger[96]
En el origen de esta crítica se encuentra la actitud mantenida por Estados Unidos en aquel momento, cuyo resultado fue la Cumbre de Ginebra de 1955 (a la que también asistieron Francia y Gran Bretaña), en la que los soviéticos lanzaron la teoría de los dos Estados con Chruščëv, sancionando de hecho la imposibilidad de una rápida reunificación alemana[97], y rechazaron la propuesta del presidente estadounidense Dwight D. Eisenhower denominada Cielo Abierto, que preveía el control aéreo cruzado de los respectivos territorios para verificar la adhesión de Estados Unidos y la URSS a los acuerdos de armamento[98].
En 1955, Kissinger fue invitado como consultor a una conferencia organizada en Quantico (VA) por Nelson Aldrich Rockefeller, entonces Asistente Especial del Presidente Eisenhower para Asuntos Exteriores, para hacer un balance de la estrategia psicológica de Estados Unidos tras la Cumbre de Ginebra[99]. Aquí propuso presionar a la URSS mediante el apoyo activo a la unificación alemana, lo que obligaría a Moscú a salir del armario y rechazar las propuestas en este sentido. Los Estados Unidos deberían trabajar para mantener a Alemania Occidental en la OTAN y en la UEO (Unión Europea Occidental), apoyando su crecimiento económico mediante la creación de una agencia internacional de desarrollo económico y la entrada de la RFA en la CEE, prevista para dos años después, útil para completar el sistema de alianzas occidentales. Los alemanes debían ser inducidos a percibir con creciente claridad a Moscú como el obstáculo a sus aspiraciones de reunificación[100].
En 1956, poco después de la reunión de Quantico, Nelson Rockefeller le ofreció a Kissinger la dirección del Proyecto de Estudios Especiales del Fondo de los Hermanos Rockefeller, un grupo de reflexión cuyo objetivo era influir en las estrategias gubernamentales en los asuntos internacionales[101]. En 1957 se publicó el libro de Kissinger Nuclear Weapons and Foreign Policy (fruto de su trabajo en el Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York, 1955-1956[102]), en el que esbozaba una crítica precisa a la estrategia de represalias masivas de la presidencia de Eisenhower, anunciada tres años antes por el secretario de Estado John Foster Dulles, y la contraponía a la teoría de la Guerra Limitada, según la cual Estados Unidos, para aplicar una política eficaz de Guerra Fría, tendría que aceptar la posibilidad de un uso limitado de las armas nucleares[103].
Publicado unos meses después de las crisis de Hungría y Suez, el libro vendió 17.000 ejemplares en su primer año, y acabó en manos del entonces vicepresidente Richard Nixon y, sobre todo, en las de Eisenhower, que recomendó el libro a Dulles. La popularidad de Kissinger explotó en octubre: tras el éxito del lanzamiento del satélite Sputnik, el miedo hizo que los estadounidenses estuvieran muy dispuestos a escuchar nuevas propuestas de defensa: Nelson Rockefeller publicó International Security: The Military Aspect, un informe escrito por Kissinger en 1955 tras la reunión de Quantico. Tras una aparición en televisión del propio Rockefeller para presentar el contenido del libro, el ensayo se solicita en cientos de miles de ejemplares[104].
Henry Kissinger y David Rockefeller en una conferencia de prensa de la Comisión Trilateral[105]
Kissinger fue miembro del Consejo de Relaciones Exteriores desde 1956 hasta 1977, y posteriormente fue miembro de su junta directiva hasta 1981[106]. El ferviente anticomunista Zbigniew Brzezinski, profesor de asuntos internacionales en la Universidad de Columbia y asesor de seguridad nacional del presidente estadounidense Jimmy Carter[107], es miembro del Consejo[108]. David Rockefeller[109], hermano de Nelson y propietario del Chase Manhattan Bank, creó en 1973 la Comisión Trilateral, de la que Kissinger y Brzezinski son miembros destacados[110].
La Comisión Trilateral es, oficialmente, un foro sobre asuntos mundiales, compuesto por personalidades de alto nivel en los ámbitos de los negocios, las finanzas y la política de Norteamérica, Europa Occidental y Japón, cuyo objetivo es promover la cooperación internacional. En realidad, se dice que la Comisión Trilateral es una de las organizaciones que dirigen en secreto el planeta[111]. Entre sus miembros, en aquellos años, sólo había un suizo: el financiero del Tesino Tito Tettamanti[112], entre cuyos clientes se encontraban Michele Sindona y otras figuras destacadas de aquella época política[113].
En 1975 se publicó el manifiesto político de la Comisión, titulado La crisis de la democracia, en el que aparecen algunos de los principios cardinales del grupo, ante todo el pesimismo y la desconfianza hacia las democracias occidentales, contaminadas por la influencia socialista. Para evitar los excesos de la democracia, sería deseable que donde no se aplique la democracia, la competencia, la antigüedad, la experiencia y los talentos especiales puedan hacerse con el poder; la participación de los negros en el sistema político es también un peligro para la democracia. Se argumenta que la democracia es más una amenaza para sí misma en Estados Unidos que en Europa o Japón, donde todavía existen legados residuales de valores tradicionales y aristocráticos, que garantizan el equilibrio entre las fuerzas democráticas y no democráticas que es fundamental para gobernar un país fiable[114].
El nacimiento de la «gran UBS»: Kissinger y el caso GAF-Interhandel
23 de junio de 1937: el fundador de IG Farben, Hermann Schmitz (segundo por la izquierda), en una cena con otros miembros de la junta directiva[115]
En 1925, las cinco mayores empresas químicas alemanas se fusionaron: Bayer, Hoechst, BASF, Agfa y Cassella y, junto con otras empresas más pequeñas, formaron el holding Interessen-Gemeinschaft Farbenindustrie AG, más conocido como IG Farben, que se convirtió instantáneamente en el primer grupo industrial químico del mundo[116]. Fue un proyecto nacido de la visión del director general del grupo industrial Metallgesellschaft, Hermann Schmitz: en 1931, escribió «Deutschlands einzige Rettung» (La única salvación de Alemania), que incitaba a la comunidad empresarial del país a apoyar políticamente y respaldar económicamente al nacionalsocialismo, y que se convirtió en el documento en el que se basó IG Farben para formar una alianza con Hitler[117].
El propio Schmitz, que llegó a la dirección de la Metallgesellschaft en un periodo de recesión económica por la quiebra de algunos bancos, teorizó en 1906 sobre la creación de paraísos fiscales para salvar a las grandes empresas y bancos de la quiebra[118]. Durante la Primera Guerra Mundial, fue llamado por Walther Rathenau para dirigir la oficina financiera del KRA Kriegsrohstoffsabteilung, que por primera vez utilizó los bancos suizos para comprar materias primas y así eludir las sanciones internacionales[119].
Con la llegada del nazismo, IG Farben se convirtió en un instrumento de estrategia militar, patentando en 1937 y 1938 el Tabun y el Sarín, dos tipos mortales de gas nervioso, cuyos efectos se probaron en los campos de concentración[120]. A esto se añadió el Zyklon B: un pesticida que, convertido en inodoro, se utilizó en las cámaras de gas de Auschwitz. Degesch (Deutsche Gesellschaft für Schädlingsbekampfung mbH), el fabricante de Zyklon, es una filial del 42,5% de IG Farben[121]. El campo de trabajo de Monowitz, que forma parte del complejo de Auschwitz, se terminó de construir en 1942 para abastecer de trabajadores a la planta de producción de caucho sintético adyacente, y fue construido por IG Farben[122]; las tecnologías y los técnicos que las utilizaban se transfirieron a Estados Unidos al final de la guerra[123].
La Standard Oil, fundada por la familia Rockefeller, ya llevaba tiempo haciendo negocios con IG Farben cuando Hitler llegó al poder. Los Rockefeller se convirtieron entonces en valiosos aliados del nacionalsocialismo: la empresa estadounidense cedió a IG Farben varias patentes[124] útiles para el desarrollo tecnológico del arsenal de guerra del Tercer Reich[125]. El Chase Manhattan Bank de Rockefeller gestionó las cuentas nazis en París, cerrando las de los clientes judíos cuando Hitler llegó al poder[126], y después de la guerra participó en la transferencia de los activos del Reichsbank a cuentas suizas y sudamericanas. La ITT de Rockefeller construye importantes sistemas de comunicación para los nazis; la IBM de Rockefeller construye máquinas para archivar a las víctimas del Holocausto[127].
En 1928, IG Farben fundó IG Chemie en Basilea: con un capital social de 290 millones de francos suizos, se convirtió en la mayor empresa suiza y en la sociedad matriz de varios holdings del gigante alemán en Europa y América Latina, así como de la estadounidense IG Chemical Corporation, formada en 1929 en Nueva York a partir de la fusión de varias empresas estadounidenses de IG Farben[128]. IG Chemie obtiene capital a bajo interés del sistema financiero suizo para la expansión de IG Farben, que mantiene un estrecho control sobre la empresa suiza al poseer sus «acciones preferentes» no cotizadas. Hermann Schmitz es elegido presidente de IG Chemie y de IG Farben[129].
30 de junio de 1925: se inaugura la nueva sede del Deutsche Länderbank en Fráncfort, controlada por BASF, luego IG Farben, y vendida después de la guerra a UBS[130]
En el consejo de administración de IG Chemie hay dos distinguidos representantes de las altas finanzas suizas: Felix Iselin-Merian, miembro del consejo de administración del Basler Bankverein, y Fritz Fleiner, profesor de derecho constitucional y miembro del consejo de administración del Kreditanstalt; también forman parte del consejo Carl Roesch, ejecutivo alemán de IG Farben, el banquero de Basilea Eduard Greuter y su cuñado August Germann-Greuter. La mayoría del banco Greuter & Co. pertenece a IG Farben[131] Felix Iselin-Merian es cuñado de Johnann Rudolf Geigy-Merian, fundador de Ciba Geigy en Basilea[132], empresa química colaboradora de IG Farben[133], que ahora, tras una serie de fusiones, forma parte del grupo multinacional Novartis.
En 1939, IG Farben, a través de IG Chemie, cambió el nombre de su filial estadounidense de American IG Chemical Company a General Aniline & Film Company (GAF); el consejo de administración incluía a destacados industriales estadounidenses como Edsel Ford, presidente de Ford Motor, Charles Mitchell, presidente del National City Bank[134], y Walter Teagle, presidente de Standard Oil[135]. La colaboración con Ford también es importante porque IG Farben tiene una participación significativa en las plantas alemanas de Ford.
El padre de Edsel, Henry Ford, es muy querido por los nazis por su llamativa financiación de Hitler, por el papel protagonista que desempeñó el alemán Ford -junto con Opel (filial alemana de General Motors)- en el plan de armamento alemán antes y durante la guerra mundial[136], y por su libro antisemita «El judío internacional» (The International Jew, 1920) [137]. El cambio de nombre y la presencia de hombres clave estadounidenses en el consejo de administración son elementos de la americanización de GAF para evitar, con la proximidad de la guerra, la temida incautación de la empresa por parte de las autoridades estadounidenses. Precisamente por este motivo, Hermann Schmitz dimitió como presidente de la empresa en 1936, nombrando a su sucesor su hermano Dietrich, que vivía en Estados Unidos y era ciudadano americano.
Tras la marcha de Schmitz, el único vínculo evidente entre IG Farben e IG Chemie siguió siendo el miembro de la junta directiva de GAF Felix Iselin-Merian. Poco después del estallido de la Segunda Guerra Mundial, IG Chemie fue incluida en la lista negra por los británicos, al ser reconocida como una empresa alemana; en consecuencia, GAF también se vio amenazada por la incautación[138], quedando las acciones preferentes de IG Chemie en manos de IG Farben. Ello seguía impidiendo declarar oficialmente a IG Chemie como sociedad matriz de GAF: dos filiales neerlandesas ficticias de IG Chemie, Chemo y Voorindu, figuraban de hecho como accionistas de referencia.
El 10 de mayo de 1940, cuando Alemania invadió los Países Bajos, todas las actividades holandesas en Estados Unidos, incluida la GAF, fueron bloqueadas por el Departamento del Tesoro, que controló desde entonces cualquier transacción financiera de la empresa. Para liberar a General Aniline & Film del yugo del gobierno estadounidense, es necesario declarar que la verdadera empresa matriz de GAF es la suiza IG Chemie, no sus filiales holandesas. Así, vuelve a surgir el problema de las acciones preferentes, opciones de garantía de dividendos que el consejo de IG Farben ejerce sobre IG Chemie[139].
30 de julio de 1938: El fundador de la empresa automovilística del mismo nombre, Henry Ford, recibe la Gran Cruz del Águila Alemana de manos del embajador alemán en Washington, acompañada de una carta personal del Führer[140]
A raíz de las presiones de los asesores estadounidenses de la GAF, Hermann Schmitz dimitió como presidente de IG Chemie en el verano de 1940, se declararon extinguidas las opciones de garantía de IG Farben, así como los derechos de recompra de acciones; el nuevo presidente era ahora Felix Iselin-Merian; no obstante, el Consejo Federal Suizo se negó a ofrecer a IG Chemie protección diplomática hasta el final del conflicto, no reconociéndola implícitamente como empresa suiza[141]. Sin embargo, GAF ha podido responder en este momento a las preguntas de la Comisión de Valores de Estados Unidos sobre la identidad de su empresa matriz, afirmando que IG Chemie posee el 91,05% de sus acciones[142]. Sin embargo, con la entrada de Estados Unidos en la guerra, en 1942 la GAF fue confiscada como empresa alemana utilizada por IG Farben como centro de espionaje y su dirección fue depuesta[143].
Al final de la guerra, IG Farben se desmembró en BASF, Bayer y Hoechst[144], sobreviviendo como una entidad legal, mantenida viva por las demandas de indemnización y la especulación inmobiliaria. Aunque la empresa ha estado formalmente en liquidación desde 1952[145], la historia de IG Farben sólo termina con su cierre oficial en agosto de 2011[146]. Hermann Schmitz y la cúpula del holding fueron reconocidos como criminales de guerra y acabaron como acusados (y condenados) en los Juicios de Núremberg[147]. IG Chemie se quedó con propiedades en Suiza, Noruega y la esperanza de recuperar el GAF confiscado en los Estados Unidos.
En el invierno de 1945, IG Chemie cambió su nombre por el de Internationale Industrie- und Handesbeteiligungen, abreviado como Interhandel; Albert Gadow, director general desde 1935 y cuñado de Hermann Schmitz, dimitió, dejando su puesto al suizo Walter Germann, sobrino del banquero Eduard Greutert; Estos nuevos intentos de romper los lazos con sus orígenes no convencieron al gobierno estadounidense, que mantuvo la confiscación del GAF incluso después de finales de 1946, cuando los Estados Unidos decidieron la devolución de otros activos incautados prudencialmente a Suiza[148].
En 1948, Interhandel presentó una demanda contra Estados Unidos por la posesión de las acciones de GAF, declarándose una empresa puramente suiza. Washington, por su parte, consideraba a IG Chemie/Interhandel como una rama del sector industrial alemán, creyendo correcto utilizarla para compensar a las víctimas del nazismo, y pidió a la empresa que proporcionara los documentos requeridos por la Ley de Comercio con el Enemigo[149]. Tras el consentimiento inicial de la empresa a la solicitud, el Consejo Federal Suizo prohibió a Interhandel y al Banco Sturzenegger & Co. (sucesor de Greutert & Co. tras la muerte de Eduard Greutert) la presentación de documentos, alegando el artículo 49 de la Ley de Bancos (secreto bancario) y el artículo 257 del Código Penal (prohibición de servicios de publicidad de datos económicos sensibles).
John Foster Dulles (centro) con su hermano Allen, poderosos defensores de la guerra contra la URSS[150]
Desde principios de los años 50, las acciones de Interhandel fueron objeto de una creciente especulación en las bolsas suizas, lo que hizo que el precio de una acción ordinaria pasara de 300 CHF en 1946 a 5450 CHF en 1960. Sin embargo, la empresa sigue perdiendo todos los casos en EE.UU. por falta de documentos, hecho que inquieta a los pequeños accionistas, que se ven azuzados por la prensa especializada, que apunta a los miembros del consejo de administración Iselin, Sturzenegger y Germann.
El punto de inflexión llegó de la mano de dos hermanos: John Foster Dulles es sobrino de Robert Lansing, secretario de Estado del presidente estadounidense Woodrow Wilson[151], y hermano de Allen Welsh Dulles, abogado del grupo Rockefeller y primer civil en ocupar el cargo de director de la CIA (1953-1961) [152]. Los hermanos Dulles, abogados de Sullivan & Cromwell, se convirtieron en financieros al final de la Primera Guerra Mundial y desempeñaron un papel fundamental en la estructuración de las reparaciones de guerra alemanas y los préstamos a los aliados.
Entre los clientes de Sullivan & Cromwell se encontraban United Fruit, Standard Oil e International Nickel, empresas implicadas en diversos golpes de Estado organizados por la CIA tras la Segunda Guerra Mundial; los Dulles estaban a la cabeza del amplio grupo de industriales y banqueros estadounidenses deseosos de invertir en la Alemania nazi tras la llegada de Hitler al poder[153]. En 1954, John Foster Dulles, a la sazón Secretario de Estado del Presidente Dwight D. Eisenhower, entró en la cuestión de Interhandel, defendiendo un proyecto de ley propuesto por el senador Everett M. Dirksen, que preveía la devolución de los bienes confiscados al enemigo a sus antiguos propietarios: aunque reconocía que el proyecto de ley entraba en conflicto con el Acuerdo de Reparaciones de 1945, del que Estados Unidos era signatario, declaraba que el acuerdo no podía limitar el poder del Congreso para tratar los bienes extranjeros como considerara oportuno. A pesar del apoyo de Dulles, que consternó a los países aliados, el proyecto de ley fue rechazado gracias a la oposición del Departamento de Justicia[154].
En 1956, el Consejo Federal Suizo solicitó a la Corte Internacional de Justicia de La Haya la apertura de un procedimiento de arbitraje sobre el asunto Interhandel. Un requisito previo para la apertura del arbitraje es el fin de los procedimientos judiciales en Estados Unidos. Sin embargo, el juicio en el que el Tribunal Supremo condenó finalmente a Interhandel a principios de 1957 fue devuelto al Tribunal de Distrito de Washington por defectos de forma[155]. En junio de 1958, el Tribunal Supremo de EE.UU., anulando las sentencias de los tribunales inferiores, volvió a admitir el caso de Interhandel, dando derecho a la empresa a ser oída sobre el fondo del asunto incluso sin la presentación de los documentos suizos.
Poco después de esta decisión, Interhandel puso en marcha un nuevo plan: Felix-Iselin, German y Sturzenegger dimitieron del consejo de administración[156]. Charles de Loës (presidente de la Asociación de Banqueros Suizos) es el nuevo presidente del consejo de administración, mientras que Eberhard Reinhard (director del Kreditanstalt-Credit Suisse), Rudolf Pfeinninger (Schweizerischer Bankverein) y Alfred Schaefer (Schweizerische Bankgesellschaft, conocido en Italia como UBS) se incorporan como miembros del consejo. Desanimados por la perspectiva de una prolongada disputa con Washington, Reinhard y Pfeinninger dimitieron en 1959, dejando el campo libre a Schaefer, que se convirtió en director general y vicepresidente de Interhandel[157].
Una caricatura satírica americana sobre el arbitraje de GAF e Interhandel[158]
En los meses anteriores, el especulador Bruno M. Saager compró la mayoría de las acciones de la empresa para UBS a un precio de ganga, entrando posteriormente en el consejo de administración[159]. Los dos banqueros no eran unos recién llegados: ya en 1932, la UBS apoyaba financieramente el Movimiento Paneuropeo, creado por Iselin-Merian y otros pro-nazis suizos, y que proponía un espacio aduanero europeo único una vez que Hitler hubiera ganado la guerra[160]. Entre los estadounidenses que, después de 1950, aseguraron la supervivencia del Movimiento Paneuropeo, su fundador, Richard Nikolaus Coudenhove-Kalergi, sólo cuenta con un nombre: el de Henry Kissinger[161].
Saager y Schaefer tuvieron la idea ganadora de cambiar su estrategia hacia Estados Unidos, aprovechando también el cambio del clima político internacional: quince años después del final de la guerra, el enemigo de Washington era la Unión Soviética, ya no la Alemania nazi; el pasado del General Aniline & film perdía así importancia. A principios de la década de 1960, Schaefer llevó a cabo una eficaz operación de presión para tratar de convencer a la administración Kennedy de que buscara un acuerdo extrajudicial[162], al que se llegó tras largas negociaciones con el Departamento de Justicia, dirigidas por Robert Kennedy: A pesar de la oposición de un amplio sector del Congreso y de la dirección de GAF, ésta se dividió entre Estados Unidos e Interhandel y sus acciones se subastaron con un beneficio de 320 millones de dólares, de los cuales 200 millones fueron para Estados Unidos y 120 millones para Interhandel (unos 500 millones de francos suizos en aquel momento[163])[164].
Una de las razones del éxito de la operación es la gran amistad entre Henry Kissinger, que sigue resolviendo los asuntos relacionados con los bienes nazis confiscados, y el embajador suizo Edouard Brunner, una amistad que, muchos años después, en 1979, convencería a Suiza de que pagara el rescate de 52 diplomáticos ciudadanos estadounidenses incautados por Irán[165]. Brunner era, en el momento del litigio de Interhandel, Secretario de Estado de Suiza y jefe del personal responsable de las negociaciones con el gobierno de Estados Unidos y el Tribunal Internacional de Justicia.
Patrick Martin, antiguo jefe de la CIA en Suiza, afirma a este respecto: «Interhandel se convirtió en un problema en 1957, cuando la Confederación Suiza presentó una denuncia ante el Tribunal Internacional de Justicia, argumentando que era una empresa suiza y, por tanto, no estaba sujeta a las restricciones sobre los activos de las naciones enemigas, e inició un procedimiento de incautación. El caso fue manejado por el astuto y paciente Secretario de Estado Edouard Brunner, amigo íntimo de Henry Kissinger, quien junto con Brunner y Brezinski había desarrollado la teoría de la «solución de pequeños pasos» en términos antisoviéticos. Suiza obtuvo ventajas de esta estrategia, siempre y cuando hiciera un frente común contra Moscú, cerrara sus puertas a todos los recursos procedentes de Europa del Este e informara a Washington de los movimientos de los agentes soviéticos en territorio suizo. Así, en 1961, Brunner y Kissinger llegaron a un acuerdo sobre Interhandel, tras lo cual Kissinger y Brezinski persuadieron a Robert Kennedy para que firmara el acuerdo de fusión de Interhandel con UBS«[166].
Tras recibir el dinero de los estadounidenses, Schaefer y Saager propusieron entonces la fusión de Interhandel con UBS en 1966, ofreciendo dos acciones de UBS por una de Interhandel; el resultado fue un aumento del capital social de UBS en 60 millones de francos suizos, además de la ganancia en el de Interhandel, que oficialmente ascendió a 600 millones de francos suizos (con algunas participaciones importantes, como la del Deutsche Länderbank -que se convirtió en la filial alemana de UBS- enormemente subestimadas). La fusión cambió por completo la suerte del pequeño banco de Zúrich, convirtiéndolo de golpe en la mayor institución de Europa[167].
Puede parecer un acontecimiento secundario de la gran historia humana, pero no lo es: Con la transformación de la UBS en un coloso multinacional, Washington y Berna obtienen, durante casi medio siglo, el control del desarrollo del capitalismo y de la política en Europa Occidental, otorgando incluso a los evasores de impuestos y a los blanqueadores de dinero la dignidad de socios ideológicos del Gran Sueño Americano y de compinches económicos de un número muy reducido de multimillonarios que, aún hoy, hacen y deshacen las fortunas de los políticos y de las naciones -una frase rimbombante que quedará más clara cuando hablemos de Gladio y de los Años de Plomo en Italia.
Los señores de la guerra: Kissinger y Richard Nixon
Richard Nixon y Henry Kissinger: el Presidente y su Secretario de Estado[168]
En 1955, con su entrada en el Consejo de Relaciones Exteriores, Kissinger inició una estrecha y fructífera relación con Nelson A. Rockefeller, entonces asistente especial para asuntos exteriores del presidente Eisenhower; para su entrada en el Consejo fue recomendado por su decano en Harvard, McGeorge Bundy (dirigió la Facultad de Artes y Ciencias de 1953 a 1960[169]), quien en 1958 le ofreció el puesto de director asociado en el recién fundado Centro para el Estudio de Asuntos Internacionales de Harvard, fundado por el propio Bundy gracias a las donaciones de la Fundación Ford. Bowie, profesor de la Facultad de Derecho de Harvard y jefe del personal de planificación política de John Foster Dulles, Secretario de Estado del Presidente Eisenhower[170]. Bowie también comparte con Kissinger la experiencia en el Consejo de Relaciones Exteriores y la Comisión Trilateral[171].
Kissinger es un viejo amigo de Arthur Schlesinger Jr., historiador y profesor de Harvard que ganó el Premio Pulitzer en 1946 y 1966. Cuando John F. Kennedy comenzó su mandato presidencial en enero de 1961, Schlesinger se convirtió en uno de sus asistentes especiales[172]; McGeorge Bundy asumió el cargo de Consejero de Seguridad Nacional de Kennedy[173] y le ofreció a Kissinger un puesto como asesor a tiempo parcial del Consejo de Seguridad Nacional, con la tarea de concentrarse en la cuestión alemana: Kissinger ocupó el puesto hasta octubre de 1961, manteniendo el contacto con Schlesinger a partir de entonces[174].
Bajo el mandato de Bundy se revisó el Consejo de Seguridad Nacional, limitando el poder del Consejo en favor del personal del presidente, dirigido por el propio Bundy[175]. En 1962, Kissinger regresó a Harvard como profesor y escribió discursos sobre política exterior para Rockefeller, con vistas a su futura campaña presidencial[176]; en 1964, Rockefeller (gobernador del Estado de Nueva York de 1958 a 1973[177]) perdió las primarias republicanas frente al senador de Arizona Barry Goldwater[178].
En octubre de 1965, Kissinger se convierte en asesor del embajador de EE.UU. en Vietnam del Sur, Henry Cabot Lodge[179], cargo a través del cual pronto se labra un importante papel en la negociación con Vietnam del Norte, llegando en 1967 a conseguir una primera reunión en París con Mai Van Bo, representante norvietnamita en Francia[180]. Desde Consejero de Seguridad Nacional en la primera administración de Nixon y Secretario de Estado en la segunda, Kissinger siguió implicado personalmente en los asuntos de la guerra de Vietnam hasta su conclusión[181].
El 20 de enero de 1969, Kissinger comenzó su tarea como Asesor de Seguridad Nacional del nuevo presidente Richard M. Nixon: siguiendo la línea reformista iniciada con John Fitzgerald Kennedy y continuada con Johnson, Nixon confió a Kissinger un nuevo cambio de la política exterior dentro de la Casa Blanca mediante una nueva reestructuración del Consejo de Seguridad Nacional, que vio triplicado el tamaño de su personal, convirtiéndose en el principal foro en el que se discutían las crisis en curso, los problemas operativos y la planificación estratégica a medio y largo plazo[182].
Abril de 1975: Henry Kissinger y el presidente Gerald Ford durante una sesión del Consejo de Seguridad Nacional[183]
El interés primordial de Nixon por la política exterior es comprensible en el contexto internacional de la época: la difícil situación del conflicto de Vietnam amenazaba seriamente con socavar la posición de Estados Unidos no sólo frente a la Unión Soviética, sino también frente a China, Europa y Sudamérica. Kissinger y Nixon modificaron así su preocupación por la posible expansión de gobiernos comunistas en el mundo en clave intervencionista: la «Doctrina Kissinger»[184] tomó forma. que no sólo continuó la guerra en Vietnam, sino que también se probó con una campaña militar en Camboya.
En abril de 1970, Estados Unidos desembarcó en el país, oficialmente para perseguir a los comunistas vietnamitas, y de hecho para garantizar la estabilidad del nuevo gobierno de Phnom Penh, que había salido el mes anterior de un golpe de Estado perpetrado por Lon Nol y Sirik Matak, el primer ministro y su adjunto[185]. Estados Unidos trató por todos los medios de mantener un gobierno leal pero totalmente inadecuado; la República Jemer, proclamada por Nol en 1970, cayó cinco años después, entregando un país devastado por la guerra civil a las sangrientas manos de Pol Pot y los Jemeres Rojos[186]. Lon Nol murió en su exilio californiano en 1985, tras haber gastado el millón de dólares que había sacado del Banco Nacional de Camboya cuando huyó[187].
El intento de restaurar el fascismo en Italia: Kissinger y los años de plomo
2 de agosto de 1980: un atentado con bomba, ordenado por los servicios secretos estadounidenses y la masonería italiana, destruye un ala de la estación de Bolonia, matando a 85 personas e hiriendo a más de 200[188]
El general Vito Miceli fue, de octubre de 1970 a 1974, jefe del Servicio de Información de Defensa (SID)[189], el aparato de inteligencia italiano creado en 1966 sobre las cenizas del SIFAR[190]. Ingresó en la logia masónica P2 en 1969 (carné 491[191]), tras conocer a Licio Gelli, quien recomendó a Miceli al Ministerio de Defensa, entonces dirigido por Mario Tanassi[192], para sustituir a Eugenio Henke al frente del SID[193]. Es diputado, elegido en las filas del MSI, del 5 de julio de 1976 al 19 de junio de 1979[194]. Graham Anderson Martin es embajador de Estados Unidos en Italia desde el 26 de septiembre de 1969 hasta el 10 de febrero de 1973, cuando es enviado a ocupar el mismo cargo en Vietnam[195].
En 1972, Martin paga al general Miceli 800.000 dólares como primer tramo de una financiación incondicional para el lanzamiento de una «operación de propaganda» que podría haber aportado, de no haberse hecho público y por tanto interrumpido, 6 millones de dólares a disposición de Miceli; este tramo es pagado por Martin al final de un largo enfrentamiento con el destacamento romano de la CIA, que se oponía a inundar de dinero a una persona con vínculos antidemocráticos de extrema derecha. La Comisión de Investigación del Congreso de Estados Unidos, que investiga las actividades encubiertas de la CIA, también determina que Miceli recibió 11 millones de dólares para entregarlos como apoyo electoral a veintiuna figuras políticas de clara filiación anticomunista[196].
La aprobación del plan de Martin vino directamente de Kissinger, entonces director del NSC y jefe del «Comité 40»[197]. órgano secreto del Consejo que se encarga de aprobar las operaciones encubiertas más importantes[198]. Con ese dinero, y con la aprobación de la logia P2, Miceli se puso a crear un SuperSID. Esta agencia secreta, paralela a Stay Behind, tiene como fuerza motriz el feroz anticomunismo de sus miembros y como objetivo la destrucción de cualquier terreno fértil para el ascenso al poder del partido comunista o de las fuerzas de izquierda o centro-izquierda; los objetivos del SID paralelo se persiguen a través de la coordinación de la actividad de la organización terrorista neofascista llamada la «Rosa de los Vientos»[199].
Red de coordinación de diferentes organizaciones subversivas, es una evolución de experiencias anteriores destinadas a fomentar la actividad de grupos terroristas de matriz antidemocrática o secesionista[200], como el Befreiungsausschuss Südtirol, movimiento simbólico del irredentismo del Tirol del Sur que, entre 1956 y 1969, llevó a cabo una serie de graves atentados en los territorios de Trento y Bolzano[201]. Una figura clave en la identificación de la «Rosa de los Vientos» en los tribunales es el coronel Amos Spiazzi, implicado en la investigación sobre la Rosa, que afirma que estaba formada por militares o ex militares de todas las ramas de las Fuerzas Armadas, hombres de confianza pertenecientes a la derecha extraparlamentaria, con los que se podía contar en caso de disturbios o atentados[202].
4 de agosto de 1974: la policía recoge los restos de las 12 víctimas de un atentado, ordenado por los servicios secretos estadounidenses y realizado por neofascistas italianos (Ordine Nuovo), que golpea el tren Italicus (que transportaba emigrantes del sur a Múnich) dentro de un túnel[203]
Dario Zagolin es una de las principales figuras de la derecha en el Véneto (y es desde la Fiscalía de Padua desde donde se inician las investigaciones sobre la «Rosa»[204]): en contacto con Gelli, reúne a los grupos neofascistas regionales con el Frente Nacional liderado por Giancarlo De Marchi: La Fenice, Ordine Nuovo, Avanguardia Nazionale (la organización fundada por otro compañero de armas de Henry Kissinger, Otto Skorzeny y Licio Gelli: Stefano Delle Chiaie), los Giustizieri d’Italia y el SAM de Carlo Fumagalli[205] constituyen la columna vertebral de la «Rosa de los Vientos»[206].
Gladio es el nombre que adopta Stay Behind en Italia. Activa desde los años 50, la Red Stay Behind fue creada con la misión de dotar a los países de la Alianza Atlántica de un organismo capaz de reaccionar rápidamente en caso de ataque de la Unión Soviética y de los países del Pacto de Varsovia, actuando detrás de las líneas enemigas con acciones de sabotaje y guerrilla[207]. Gladio, al igual que las organizaciones de los Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Francia, Suiza, Noruega y Austria, fue creada y dirigida bajo el control de los servicios secretos nacionales en colaboración con los Estados Unidos, reclutando a sus agentes también entre la población civil[208].
El magistrado italiano que dirigía la investigación sobre Gladio, Gianfranco Donadio, descubrió que la financiación de esta estructura no sólo estaba garantizada por los servicios secretos estadounidenses, sino también por una red de empresas italianas y suizas, una de las cuales, FIMO SA de Chiasso, era al mismo tiempo la terminal de blanqueo del dinero procedente del tráfico de drogas entre Sudamérica y Sicilia que era objeto de las investigaciones de Giovanni Falcone y Paolo Borsellino[209]. Esta empresa, fundada en los años 50 por oscuros empresarios genoveses, ha sido recapitalizada varias veces a lo largo de los años por la UBS, a través de su gestor Reto Kessler, socio de Bruno Saager[210].
Además de los ataques externos, la tarea de Gladio era frustrar las amenazas internas destinadas a desestabilizar el equilibrio político existente, con especial referencia al peligro comunista; Vittorio Andreuzzi, simpatizante del MSI enrolado en Gladio en 1959, declara: «Los instructores nos explicaron que nuestra organización, que debía permanecer secreta, tendría que entrar en funcionamiento para contrarrestar las revueltas callejeras comunistas. No se dijo, salvo con breves insinuaciones, que la estructura debía servir también para contrarrestar una invasión extranjera. Recuerdo con certeza que, más que nada, los formadores hablaban de la necesidad de prepararnos para enfrentarnos a los comunistas italianos y a sus iniciativas subversivas«[211].
A partir de las actas de la Comisión Parlamentaria de Investigación sobre el Terrorismo, surgieron sospechas sobre el papel de Gladio en la ejecución del plan de Desmagnetización[212], planificado por el PSB en 1951 (Kissinger comenzó a colaborar con el PSB en 1952) para debilitar al Partido Comunista y al sindicato confederal CGIL, expulsándolos de los círculos de la administración pública e impulsando la aprobación de leyes liberticidas en materia de seguridad pública[213]. El 26 de febrero de 1991, el entonces Primer Ministro, Giulio Andreotti, entregó al Parlamento una lista de 622 ciudadanos italianos que pertenecían al Gladio[214]: entre ellos estaban Francesco Cossiga[215] (Subsecretario de Estado de Defensa en 1966, 1968, 1969, Ministro del Interior en 1976, 1978, Primer Ministro en 1979, 1980, Presidente del Senado en 1983, Presidente de la República en 1985-1992[216]), Paolo Emilio Taviani[217] (Ministro del Interior en 1962, 1963, 1973[218]), Giovanni de Lorenzo (general, jefe de la SIFAR de 1955 a 1962) [219].
12 de diciembre de 1969: una bomba colocada en la sede milanesa de la Banca Nazionale dell’Agricoltura mata a 17 personas y hiere a 88: es un atentado de los neofascistas de Ordine Nuovo, buscados por la CIA y la masonería[220]
A partir de 1969, Gladio se convirtió en parte integrante de la doctrina Kissinger: gracias al apoyo de la CIA, la organización desempeñó un papel estratégico en la desestabilización del país: en 1984, Vincenzo Vinciguerra, antiguo terrorista de Ordine Nuovo y Avanguardia Nazionale, responsable de la masacre de Peteano (31 de mayo de 1972), escuchado por los jueces en el juicio por la masacre de la estación de Bolonia, describe la existencia de una estructura encubierta dirigida por la OTAN y apoyada por los servicios secretos, así como por las fuerzas políticas y militares italianas[221].
Gianadelio Maletti, general desde 1971 a cargo del departamento «D» (contraespionaje) del SID, habla de la implicación de la CIA en masacres atribuibles a grupos de extrema derecha, mediante el suministro del material necesario, como los explosivos utilizados en la masacre de Piazza Fontana[222]. Maletti, que fue condenado definitivamente junto con el capitán Antonio Labruna por engaño en el juicio de Piazza Fontana[223], es miembro de la P2 (Roma, 499) [224]. También fue condenado a seis años por no conservar la documentación secreta relacionada con el M.Fo. Biali en el juicio por asesinato de Pecorelli[225]. Licio Gelli y la logia masónica Propaganda 2 (P2) son, sin duda, interlocutores privilegiados de Estados Unidos en el plan de aplicación de la doctrina Kissinger a través de la estrategia de la tensión, como lo atestiguan los vínculos que Gelli mantiene desde 1969 con el general Alexander Haig, asistente personal de Kissinger en el Consejo de Seguridad Nacional[226].
El P2 recibió financiación de la CIA para organizar la lucha contra el comunismo y la estabilización del país mediante su desestabilización. El agente de la CIA Richard Brenneke afirma conocer bien a Gelli, al que describe como un hombre de larga trayectoria en la inteligencia estadounidense[227]. Además del papel desempeñado por los afiliados ya mencionados, es posible deducir la participación de la logia en actividades de desestabilización a partir de la participación planificada de sus miembros en el intento de golpe de Estado de Borghese de 1970: el general del ejército del aire Giuseppe Casero (Roma, 488[228]), el coronel Giuseppe Lo Vecchio (Roma, 514[229]) y el abogado Filippo De Jorio (Roma, 511[230]), todos ellos imputados por su participación en el acontecimiento[231]. El propio Gelli habría tenido, en el proyecto subversivo, el papel de entregar al Presidente de la República, Giuseppe Saragat, en manos del Frente Nacional (la formación dirigida por el príncipe Junio Valerio Borghese[232]), ya que estaba en posesión de un documento que le permitía el libre acceso al Quirinal, obtenido por intercesión del general Miceli[233].
Estados Unidos conocía la participación mafiosa de Borghese en la operación: Tommaso Buscetta afirma que, tras regresar a Nueva York después de una estancia en Sicilia para conocer los detalles del papel de la mafia en el golpe, fue detenido por la policía e interrogado sobre la evolución del asunto, que era secreto en ese momento[234]. La correspondencia del embajador Martin con el Departamento de Estado y con Kissinger, asesor de seguridad nacional de Nixon en aquella época, revela la participación en el golpe de los altos mandos de la Marina y la Fuerza Aérea italianas, además de confirmar el conocimiento directo del proyecto por parte del gobierno estadounidense[235].
A través del empresario italoamericano Pier Talenti, amigo personal de Nixon, y del ingeniero de Selenia Hugh H. Fenwick[236], el Frente Nacional estableció una relación con los dirigentes estadounidenses; en 1968, Talenti creó el comité italiano para la elección de Nixon a la Casa Blanca, del que también formaba parte Fenwick; tras recaudar en Roma cientos de miles de dólares de aliados y amigos, Talenti se ganó la confianza del presidente y la posibilidad de hablar con el general Haig para advertirle del peligro de una inminente toma del poder por parte de los socialistas en Italia. Sugirió el nombramiento de Graham Martin como nuevo embajador en Roma para contrarrestar el ascenso de la izquierda; la propuesta contó con el favor tanto de Nixon como de Kissinger, por lo que Martin comenzó su mandato en 1969[237]. En 1970, por sugerencia del médico y militante del Frente Nacional Adriano Monti, Fenwick se dirigió al embajador Martin para que actuara como enlace directo entre la administración estadounidense y los golpistas; el resultado fue la conversación que mantuvo con el empresario Remo Orlandini, amigo e importante colaborador financiero de Borghese[238].
Mayo de 1972: el Primer Ministro Giulio Andreotti, entre los funcionarios de los servicios secretos que posteriormente participaron en las investigaciones sobre Gladio y los atentados neofascistas[239]
De ascendencia lituana, el del arzobispo de Orta y presidente del IOR, Paul Casimir Marcinkus, es otro nombre que vincula a la administración Nixon con la P2 y la mafia siciliana: entra en contacto con el financiero siciliano Michele Sindona (ficha P2 501[240]) y con Roberto Calvi (Milán, 519[241]) gracias a su amistad con David Matthew Kennedy, presidente del Continental Illinois National Bank de Chicago. En 1964 se supo que la Continental International Finance Co., filial del Banco Continental, poseía el 24,5% del capital de la Banca Privata Finanziaria de Sindona (el banco mercantil, vinculado a la Mafia, nacido de una costilla de la Fasco AG de Vaduz, presidida por el financiero suizo Tito Tettamanti) [242].
Los vínculos entre Kennedy y Sindona se evidencian por la participación de este último como socio en la Continental Finance de Kennedy, que puso a Sindona en contacto con Charles Bludhorn, el rumoreado mecenas del conglomerado Gulf and Western Industries (hoteles, pozos de petróleo, minas, la Paramount). Gracias a su amistad con Bludhorn y Kennedy, así como con los jefes de la mafia Vito Genovese y Joe Adonis, Sindona también se convirtió en asesor financiero de la Cosa Nostra.
El conocimiento entre Marcinkus y Sindona a través de Kennedy se produjo cuando el prelado aún no era presidente del IOR (el banco estatal del Vaticano), que, sin embargo, tenía una participación del 24,5% en el Banco Financiero Privado de Sindona desde 1962, año en que el financiero tomó el control del Instituto[243]. 1969 fue un año crucial en la evolución del asunto: Kennedy fue nombrado secretario del Tesoro por el recién elegido presidente Richard Nixon, del que era un ferviente partidario[244]; en junio, Marcinkus fue nombrado presidente del IOR[245]. De este modo, Sindona tiene como socios en la Banca Financiera Privada a sus asociados el Secretario del Tesoro de EEUU y el Presidente del IOR.
A través de Sindona, Marcinkus conoce al otro piduista Roberto Calvi, presidente del Banco Ambrosiano, que en 1971 funda el Cisalpina Overseas Nassau Bank, propiedad de Compendium SAH de Luxemburgo[246] y controlado por Sindona, Marcinkus y el Banco Ambrosiano[247]. Marcinkus, Sindona, Calvi, pero también Umberto Ortolani (financiero y empresario, miembro destacado de la P2[248], señalado en 2020 por la Fiscalía de Bolonia como uno de los instigadores de la masacre del 2 de agosto de 1980[249]) y Licio Gelli: el deseo de hacer negocios y adquirir poder se entrelaza, en su caso, con el objetivo de apoyar a los regímenes dictatoriales que, en Sudamérica, desempeñan un papel clave en la estrategia anticomunista tan querida tanto por la derecha italiana como por la administración Nixon, con especial referencia a Henry Kissinger, que se implementa en la Operación Cóndor[250].
Calvi inauguró en 1980 en Buenos Ayres, la sede del Banco Ambrosiano de América del Sud[251], en el país en el que gobernaban el almirante Emilio Eduardo Massera (tarjeta P2: Buenos Aires, 478[252]) y el presidente Jorge Rafael Videla, protagonistas de la página más negra de la historia argentina. Massera está en relación con el almirante italiano Giovanni Torrisi (ficha P2: Roma, 631[253]). La Argentina de Videla, gracias a la mediación de Massera, compra enormes cantidades de armas a Italia[254].
Junio de 1978: Henry Kissinger (izquierda) en conversación con el dictador argentino Jorge Rafael Videla, estrechamente vinculado a la logia P2 de Licio Gelli[255]
Calvi abrió otras oficinas del Ambrosiano en Perú[256], Brasil, Nicaragua[257] y Panamá, mientras que en Chile, el Banco Ambrosiano tenía una participación en el Banco Hipotecario, el mayor grupo financiero que apoyaba a Pinochet. En Guatemala, el Ambrosiano financia, a través de la empresa Brisa SA, el gobierno derechista del general Vernon, antiguo agente de la CIA. Cuando el régimen dictatorial de Somoza en Nicaragua entró en crisis por la presión sandinista en 1978, el Banco Ambrosiano subvencionó al gobierno con cientos de millones de dólares[258].
La enorme cantidad de dinero que mueven el Vaticano, la Logia P2, la Mafia y la CIA hacia Sudamérica sirve para imponer el yugo de las juntas militares leales al gobierno estadounidense en el continente. Cuando la población de una de estas naciones se rebela, como en el Chile de Allende, se pone en marcha la enorme maquinaria de la muerte para sofocar con sangre los intentos de los pueblos latinoamericanos por emanciparse.
Sudamérica neonazi: Kissinger y la masacre del pueblo chileno
Febrero de 1968: Sesión de autodeclaración de los presos de la institución neonazi Colonia Dignidad[259]
La Operación Cóndor nace de la misma preocupación que anima las gestiones de Nixon y Kissinger en Italia, reforzada por la victoria del socialista Salvador Allende en las elecciones parlamentarias chilenas del 5 de septiembre de 1970[260]. Antes y después de esa fecha, el presidente y su asesor, que desde el comienzo del segundo mandato de Nixon se convirtió en Secretario de Estado, trabajaron para socavar la posición de Allende. El primer intento fue a través del embajador de Estados Unidos en Chile, Edward Korry, que no logró evitar la victoria de los socialistas.
En 1972 se supo que la ITT (International Telephone and Telegraph Corp.) -en la que Nelson A. Rockefeller tenía una participación[261]– y la CIA venían colaborando desde 1971 para perjudicar al gobierno de Allende mediante: a) el reclutamiento de colaboradores en las fuerzas armadas chilenas para organizar una revuelta; b) el impulso a las empresas estadounidenses para que cooperaran con el fin de provocar una tormenta económica en el país[262]; c) la participación de gobiernos extranjeros en la presión sobre el gobierno chileno, también mediante acciones de sabotaje diplomático[263].
Ya después de la toma de posesión de Allende, Kissinger impulsó la aplicación de una política intransigente hacia Chile, temiendo que la afirmación del gobierno de Santiago pudiera servir de modelo para otros, como Italia[264]. Tras el golpe de Estado del general Augusto Pinochet (11 de septiembre de 1973), que condujo a la muerte de Allende y a la instauración de un régimen militar dictatorial, Kissinger aplaudió al nuevo líder, a pesar de ser consciente de las masacres perpetradas por el régimen desde los días inmediatamente posteriores al golpe[265].
En diciembre de 1974, en una reunión de personal del Departamento de Estado, Kissinger (ahora secretario de Estado del presidente Gerald Ford) se opuso firmemente a la propuesta del senador Edward «Ted» Kennedy de detener la ayuda militar de EE.UU. al régimen de Pinochet; la propuesta de Kennedy se derivaba de la creciente presión de las asociaciones de derechos humanos, un argumento que Kissinger abordó a regañadientes debido a las consecuencias perjudiciales que tendría el no apoyo al régimen a nivel local y general, creando un peligroso precedente que podría frustrar el trabajo realizado para detener el temido «avance rojo»[266].
Los problemas de Kissinger con el Congreso estadounidense continuaron durante 1975, cuando se reunió con el ministro chileno de Asuntos Exteriores, Patricio Carvajal, para sugerirle que fuera el anfitrión de la reunión de la OEA (Organización de Estados Americanos) [267] del año siguiente y que, al mejorar la imagen del régimen, cambiara la actitud del Congreso estadounidense respecto a la asistencia militar y facilitara el aumento de los créditos del Ex-Im Bank[268] y de los préstamos multilaterales a Chile, así como la venta en efectivo de equipos militares[269].
11 de septiembre de 1973: Salvador Allende, espera el ataque final de los militares rebeldes, dirigidos por el general Pinochet[270]
Desde el principio (1973), el plan Cóndor implicó a la red de servicios secretos de varios países latinoamericanos (Argentina, Chile, Uruguay, Bolivia, Paraguay, Brasil, Perú y Ecuador) en una colaboración secreta con la CIA y el gobierno de Washington: esta red de terror permitía a los gobiernos enviar escuadrones de la muerte a los pueblos para secuestrar, matar y torturar a enemigos reales o supuestos, especialmente a los refugiados de los estados vecinos que intentaban escapar de la persecución.
Cóndor lleva el terror de Estado a un nivel hasta ahora desconocido, desatándolo en toda Sudamérica, después de que sucesivos (o anteriores, en el caso de Brasil[271]) golpes militares de derecha, a menudo alentados por Estados Unidos, hubieran acabado con la democracia en todo el continente. Cóndor es el detonante y el combustible de un vasto fenómeno en el que decenas de miles de personas de toda Sudamérica fueron asesinadas, desaparecidas o torturadas por los gobiernos militares en las décadas de 1970 y 1980[272].
La Operación Cóndor utiliza como base una colonia nazi en Chile, dirigida por el Dr. Joseph Mengele, conocida como Colonia Dignidad: su fundador, Walther Rauff, es un jerarca nazi colaborador del CIC de Kissinger, y es buscado en Alemania por secuestrar y abusar de niños pequeños[273]. La Colonia Dignidad fue utilizada por el equipo de Pinochet para entrenar para el golpe de Estado de 1973, sirviendo posteriormente como centro de tortura donde se «desaparecieron» prisioneros. Es posible que muchos de los criminales de guerra nazis más importantes de Sudamérica vivieran en Colonia Dignidad[274]. En 1993, se encontró en Paraguay un archivo de documentos denominado «Archivos del Terror», en el que se detallaba la participación de criminales de guerra nazis (la mayoría de los cuales llegaron al continente americano como parte del proyecto de fuga Ratline) en la Operación Cóndor y se enumeraban las víctimas, incluyendo agentes israelíes que trataban de encontrar nazis para juzgarlos[275].
Es muy probable que George Bush padre (entonces director de la CIA[276]) también colaborara con Nixon y Kissinger en la dirección de la Operación Cóndor. Sin embargo, se ha establecido históricamente que Junio Valerio Borghese y Licio Gelli se prepararon para el golpe de Estado asistiendo a un curso de formación en la Colonia Dignidad[277]. La historia de este centro de adiestramiento, un vástago extremo de las actividades de las SS durante la Segunda Guerra Mundial, sólo fue posible gracias a la cobertura de los gobiernos amigos del poder estadounidense, y por tanto del conglomerado formado por la CIA, la NSA, la Secretaría de Estado y la Presidencia de la República. En cada uno de estos puestos, o junto a ellos, durante todos los años de terror imperialista estadounidense, siempre hubo una persona, Henry Kissinger.
1954: El mural de Diego Rivera representa a John Foster Dulles estrechando la mano del dictador de Guatemala, Carlos Castillo Armas; junto a él está su hermano Allen. La bomba sobre la que Dulles apoya su mano tiene la cara de Eisenhower[278]
Cuando sus jefes son arrastrados a los tribunales, hay un banquero que paga los mejores abogados para defender la memoria de Colonia Dignidad: se trata del suizo François Genoud, amigo personal de Stefano Delle Chiaie y de Henry Kissinger[279], que participó en la financiación de los traslados de jerarcas nazis llevados a cabo por el CIC de Kissinger con el dinero que recibió, a lo largo de los años, del NSDAP, y con la publicación de los diarios de Joseph Goebbels[280] y de muchos documentos raros y originales que, al final de la guerra, había recibido como regalo de uno de los amigos de mayor confianza de Adolf Hitler, el oficial de las SS Martin Bormann[281]. Como se puede ver, a lo largo de los años se trata siempre de las mismas personas, del mismo círculo de amigos, de los compañeros de las mismas organizaciones paramilitares nazis.
Dentro de unos meses cumplirá 100 años. A su manera, es un monumento, el último potentado superviviente de los que, durante e inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, contribuyeron a construir la era de la Guerra Fría y a gestionarla con un puño de hierro similar al de Josip Stalin. El dictador bolchevique cometió crímenes indecibles contra su propio pueblo. Kissinger y sus cómplices sembraron la muerte y la destrucción en todo el mundo, llamando a Europa Occidental a pagar un altísimo tributo a cambio de la protección militar y el impulso del Plan Marshall. Pero esa es otra historia. El relato de la verdadera historia de los años entre 1945 y 1973 -es decir, entre el auge y el fin del capitalismo industrial- sólo comienza ahora, de la mano de quien fue su intérprete más poderoso, más pragmático, más inescrupuloso, más cínico. Es justo que se sepa, antes de que su muerte lo convierta en un icono.
[1] https://www.nytimes.com/2021/05/27/business/walter-kissinger-dead.html
[2] «Ballungsraum Nürnberg – Fürth – Erlangen», Entwurf einer kulturlandschaftlichen Gliederung Bayerns als Beitrag zur Biodiversität, Bayerisches Landesamt für Umwelt, 2011
[3] https://www.nordbayern.de/region/fuerth/furths-rathaus-lockte-nach-italien-1.8180298
[4] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 15
[5] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 20
[6] https://www.reuters.com/article/soccer-germany-kissinger-idINDEE88E05Q20120915
[7] Niall Ferguson, “Kissinger: The Idealist, 1923-1968”, Penguin, New York, 2015, p. 67
[8] https://www.archives.gov/publications/prologue/2010/winter/nuremberg.html
[9] https://www.nytimes.com/1975/12/16/archives/kissinger-visits-home-town-gets-big-hand-kissinger-visits-home-town.html
[10] https://www.facinghistory.org/resource-library/text/nazi-telegram-instructions-kristallnacht-november-10-1938
[11] https://www.britannica.com/event/Kristallnacht
[12] https://www.nytimes.com/1998/11/16/nyregion/p-kissinger-97-the-mother-of-a-statesman.html
[13] https://warfarehistorynetwork.com/article/henry-kissingers-world-war-ii/
[14] https://achievement.org/achiever/henry-kissinger-ph-d/
[15] http://www.world-war-2.info/casualties/
[16] http://www.pierce-evans.org/ASTPinWWII.htm
[17] https://www.fpri.org/contributor/henry-kissinger/
[18] https://www.sfasu.edu/heritagecenter/9809.asp
[19] https://www.pbs.org/thinktank/transcript1138.html
[20] https://www.liberationroute.com/it/stories/129/battle-of-the-bulge
[21] https://visitmarche.be/en/categorie/offres-en/show-en/offre/11145/ ; Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 48
[22] https://www.gijewsfilm.com/interviews/henry-kissinger.php#:~:text=In%20this%20capacity%2C%20Kissinger%20served,of%20the%20town%20of%20Hanover.
[23] https://www.globalo.com/why-kraemer-and-kissinger-split/
[24] Jeremi Suri, «Henry Kissinger and the American Century», Harvard University Press, 2007, p. 78
[25] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 46
[26] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 44
[27] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, pp. 47-48
[28] https://www.tabletmag.com/sections/news/articles/kissinger-on-liberating-ahlem-concentration-camp
[29] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 48
[30] https://army.togetherweserved.com/army/servlet/tws.webapp.WebApps?cmd=ShadowBoxProfile&type=Person&ID=372781&binder=true
[31] https://portal.ehri-project.eu/authorities/ehri_cb-006504
[32] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 52
[33] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 51
[34] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, pp. 53-54
[35] Jeremi Suri, «Henry Kissinger and the American Century», Harvard University Press, 2007, p. 80
[36] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 55
[37] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 55
[38] Charles Stuart Kennedy, Interview with Mr. H. Sonnenfeldt, “The Association for Diplomatic Studies and Training Foreign Affairs Oral History Project”, 2000
[39] https://www.bergstraesser-anzeiger.de/orte/bensheim_artikel,-bensheim-raetsel-geloest-das-haus-ist-gefunden-_arid,461162.html
[40] Jeremi Suri, «Henry Kissinger and the American Century», Harvard University Press, 2007, p. 81
[41] https://www.nasa.gov/centers/marshall/history/vonbraun/bio.html
[42] Jeremi Suri, «Henry Kissinger and the American Century», Harvard University Press, 2007, p. 81
[43] https://www.archives.gov/iwg/declassified-records/rg-330-defense-secretary ; https://www.archives.gov/files/iwg/declassified-records/rg-330-defense-secretary/foreign-scientist-case-files.pdf
[44] https://ahrp.org/pivotal-role-of-allen-dulles-in-shielding-nazi-war-criminals/
[45] Peter Dale Scott, «Why No One Could Find Mengele: Allen Dulles and the German SS», The Threepenny Review, No. 23 (Autumn, 1985), pp. 16-18
[46] https://www.archives.gov/iwg/declassified-records/rg-263-cia-records/rg-263-report.html
[47] https://www.deutschlandfunkkultur.de/hitlers-spione-an-der-ostfront-100.html
[48] https://warfarehistorynetwork.com/cold-war-spies-general-reinhard-gehlen/
[49] Paolo Fusi, Il cassiere di Saddam, Consumedia, Bellinzona 2003
[50] https://www.swissinfo.ch/eng/the-bizarre-case-of-youssef-nada-and-switzerland-s-role-in-the–war-on-terror-/47075022 ; https://www.lexology.com/library/detail.aspx?g=10ddacd5-8060-407e-b647-39a248d00716
[51] Kenneth J. Campbell, «Otto Skorzeny: The Most Dangerous Man in Europe», American Intelligence Journal, Vol. 30, No. 1 (2012), pp. 146-147
[52] Peter Dale Scott, «Why No One Could Find Mengele: Allen Dulles and the German SS», The Threepenny Review, No. 23 (Autumn, 1985), pp. 16-18 ;
[53] https://islandora.wrlc.org/islandora/object/terror%3Aroot
[54] http://rochester.indymedia.org/node/1403
[55] Peter Dale Scott, «Why No One Could Find Mengele: Allen Dulles and the German SS», The Threepenny Review, No. 23 (Autumn, 1985), pp. 16-18 ; Kenneth J. Campbell, «Otto Skorzeny: The Most Dangerous Man in Europe», American Intelligence Journal, Vol. 30, No. 1 (2012), pp. 146-147
[56] https://www.antifainfoblatt.de/artikel/lateinamerika-fluchtpunkt-nach-ns-terror
[57] http://www.irwish.de/PDF/Dienste+Kriege/Wertz-Die_Weltbeherrscher.pdf
[58] https://www.antifainfoblatt.de/artikel/lateinamerika-fluchtpunkt-nach-ns-terror
[59] https://www.antifainfoblatt.de/artikel/lateinamerika-fluchtpunkt-nach-ns-terror
[60] https://www.memoiresdeguerre.com/article-terror-s-legacy-schacht-skorzeny-allen-dulles-112826449.html ; http://jens-kroeger.homepage.t-online.de/page1/vatikan.html ; https://www.newsweek.pl/historia/krwawe-miliardy-reichsfurera-ss-czy-himmler-gromadzil-fundusze-na-budowe-iv-rzeszy/nkh2jjb
[61] https://conversacionsobrehistoria.info/2018/12/01/historia-de-un-neonazi-aleman-y-su-fortin-de-alicante/
[62] https://www.spiegel.de/politik/ein-mehr-als-bedrueckendes-schauspiel-a-e0b3da9e-0002-0001-0000-000040763997
[63] http://leg13.camera.it/_dati/leg13/lavori/doc/xxiii/064v01t02_RS/00000011.pdf
[64] https://theanarchistlibrary.org/library/stuart-christie-stefano-delle-chiaie
[65] https://www.parlamento.it/773?shadow_organo=405513 ; https://www.derechos.org/sorin/doc/p2.html ; https://archive.org/details/nazilegacyklausb00link
[66] https://www.warhistoryonline.com/instant-articles/nazi-officer-became-assassin-israel-2-x.html?firefox=1
[67] Marvin and Bernard Kalb, “Kissinger”, Little, Brown, Toronto, 1974, p. 44
[68] https://www.nytimes.com/1979/01/11/archives/dr-william-y-elliott-82-dies-a-harvard-professor-emeritus-hissed-by.html?auth=login-google1tap&login=google1tap
[69] https://www.washingtonpost.com/archive/local/1979/01/12/william-y-elliott-dies/71e404b8-d42d-456c-97c2-5ca975aff883/
[70] https://www1.cmc.edu/pages/faculty/welliott/teachers/elliott.htm
[71] https://pressbooks.pub/delliott/chapter/chapter-xii1-harvard-university-and-the-cold-war/
[72] https://pressbooks.pub/delliott/chapter/chapter-xii1-harvard-university-and-the-cold-war/
[73] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 31
[74] The New York Times, August 26, 1951, p. 56
[75] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 32
[76] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 33
[77] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 70
[78] Jeremi Suri, «Henry Kissinger and the American Century», Harvard University Press, 2007, pp. 122-123
[79] https://wcfia.harvard.edu/about/theory-and-practice-harvards-center-international-affairs-1958%E2%80%931983
[80] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 81
[81] https://archives-manuscripts.dartmouth.edu/agents/people/739
[82] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 81
[83] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 85
[84] Susan Maret, «Murky Projects and Uneven Information Policies: A Case Study of the Psychological Strategy Board and CIA”, Secrecy and Society, Vol. 1, No. 2, Art. 6, 2018, p. 1
[85] Gary D. Rawnsley, «Cold-War propaganda in the 1950s», St. Martin’s Press, 1999, p. 2
[86] Susan Maret, «Murky Projects and Uneven Information Policies: A Case Study of the Psychological Strategy Board and CIA”, Secrecy and Society, Vol. 1, No. 2, Art. 6, 2018, pp. 7-8
[87] https://publicintelligence.net/cia-bluebird/ ; https://unredacted.com/2010/04/23/document-friday-project-artichoke-or-the-cia-attempt-to-create-a-manchurian-candidate/ ; https://www.nytimes.com/1977/09/03/archives/cia-says-it-found-more-secret-papers-on-behavior-control-senate.html
[88] Luca Mershed, «L’Operazione Odessa e la diffusione del nazismo in Argentina e nelle Americhe», Università La Sapienza, Facoltà di Scienze Politiche, Sociologia e Comunicazione, Dottorato di Ricerca in Studi Politici, Roma, 2019, pp. 193-194
[89] https://www.trumanlibrary.gov/library/truman-papers/harry-s-truman-papers-staff-member-and-office-files-psychological-strategy
[90] Edward P. Lilly, “The Psychology Strategy Board and its Predecessors: Foreign Policy Coordination 1938-1953”, in Gaetano L. Vincitorio (ed.), “Studies in Modern History”, St. John’s University Press, 1968, p. 363
[91] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, p. 85
[92] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, pp. 89-90
[93] https://archive.org/details/nuclearweaponsfo00kiss
[94] Henry A. Kissinger, “Nuclear Weapons and Foreign Policy”, Harper & Brothers, New York, 1957, p. 42
[95] Henry A. Kissinger, “Nuclear Weapons and Foreign Policy”, Harper & Brothers, New York, 1957, p. 339
[96] https://www.trumanlibrary.gov/photograph-records/97-1869
[97] https://www.hdg.de/lemo/kapitel/geteiltes-deutschland-gruenderjahre/deutsche-frage/zwei-staaten-theorie.html
[98] https://www.politico.com/story/2010/07/ike-offers-open-skies-plan-at-geneva-summit-july-21-1955-039988
[99] Jessica C. E. Gienow-Hecht, Frank Schumacher, «Culture and International History», Berghahn Books, 2003,p. 259
[100] Holger Klitzing, «The Nemesis of Stability: Henry A. Kissinger’s Ambivalent Relationship with Germany», WVT, Wissenschaftlicher Verlag Trier, 2007, pp. 92-93
[101] https://dimes.rockarch.org/collections/g65L6fRBpy4f5hiYC8Dzui
[102] Walter Isaacson, «Kissinger: a biography», Simon & Schuster, New York, 1992, p. 83
[103] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 42
[104] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 44
[105] https://www.amazon.com/Vintage-Kissinger-conference-beside-Rockefeller/dp/B07LB7YR3R
[106] https://www.cfr.org/henry-kissinger-chair-us-foreign-policy
[107] https://www.nytimes.com/2017/05/26/us/zbigniew-brzezinski-dead-national-security-adviser-to-carter.html
[108] https://www.csis.org/features/zbigniew-k-brzezinski
[109] https://www.nytimes.com/2017/03/20/business/david-rockefeller-dead-chase-manhattan-banker.html
[110] https://www.trilateral.org/
[111] https://www.washingtonpost.com/archive/lifestyle/1992/04/25/beware-the-trilateral-commission/59c48198-9479-4c80-a70a-a1518b5bcfff/
[112] Holly Sklar, Trilateralism: The Trilateral Commission and Elite Planning for World Management. South End Press, Boston 1980
[113] Gian Trepp, Swiss Connection, Unions Verlag, Zürich 1999, pages 358-391; https://www.publiceye.ch/en/topics/corruption/switzerland-offshore-welcome-to-shell-company-paradise/in-ticino-fiduciary-firms-get-involved-in-fashion-commodity-trading-and-hidden-cash-flows
[114] Michel J. Crozier, Samuel P. Huntington, Joji Watanuki, «The Crisis of Democracy – Trilateral Commission», Report on the Governability of Democracies to the Trilateral Commission, New York University Press, 1975, pp. 127-129
[115] https://digitalcommons.law.lsu.edu/nuremberg_photos/94/
[116] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, p. 84
[117] Hermann Schmitz, Deutschlands einzige Rettung, HaDek Verlag, Hannover 1931
[118] Robert Liefmann, Beteiligungs- und Finanzierungsgesellschafte, Leipzig 1913
[119] Walther Rathenau: Die Organisation der Rohstoffverteilung, manoscritto conservato nella Deutsche Nationalbibliothek di Lipsia, 1914
[120] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York: Free Press, 1978, pp. 132-133
[121] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York: Free Press, 1978, pp. 122-123
[122] http://www.wollheim-memorial.de/en/kz_bunamonowitz_en
[123] https://www.chemie.de/lexikon/Buna-Werke.html
[124] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», Free Press, New York, 1978, p. 93
[125] https://www.nytimes.com/1978/08/06/archives/with-a-branch-at-auschwitz-farben.html
[126] https://www.wsj.com/articles/SB951271524654360876
[127] http://rochester.indymedia.org/node/1403
[128] Alfred D. Chandler, «Scale and Scope: The Dynamics of Industrial Capitalism», Harvard University Press, 1994, pp. 573-574
[129] Alfred D. Chandler, «Scale and Scope: The Dynamics of Industrial Capitalism», Harvard University Press, 1994, pp. 573-574
[130] https://www.wikiwand.com/de/Deutsche_L%C3%A4nderbank#Media/Datei:Berlin,_Unter_den_Linden_78_im_Jahr_1925.1.jpg
[131] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, pp. 84-85
[132] https://www.erih.net/how-it-started/stories-about-people-biographies/biography/geigy-merian
[133] https://zeitzeugengw.de/Industrie/Geigy/Schweizer%20Chemieunternehmen%20im.pdf
[134] https://www.company-histories.com/GAF-Corporation-Company-History.html
[135] https://content.time.com/time/subscriber/article/0,33009,795457,00.html
[136] https://www.washingtonpost.com/wp-srv/national/daily/nov98/nazicars30.htm
[137] https://perspectives.ushmm.org/item/the-international-jew-the-worlds-foremost-problem
[138] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, p. 86
[139] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York : Free Press, 1978, pp. 190-191
[140] https://www.spiegel.de/geschichte/henry-ford-und-die-nazis-a-947358.html ; https://theintercept.com/2020/05/22/trump-hails-good-bloodlines-henry-ford-whose-anti-semitism-inspired-hitler/
[141] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, p. 87
[142] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York : Free Press, 1978, p. 193
[143] Malcolm S. Mason, «The General Aniline & Film Co. Case», in «Proceedings of the American Society of International Law at Its Annual Meeting (1921-1969)», Vol. 52, International Law and the Political Process (April 24-26, 1958), Cambridge University Press, p. 118
[144] https://www.dw.com/en/stock-of-former-nazi-chemicals-giant-to-be-delisted/a-15327052
[145] https://www.nytimes.com/1999/05/02/business/the-business-world-ig-farben-a-lingering-relic-of-the-nazi-years.html
[146] https://www.dw.com/en/stock-of-former-nazi-chemicals-giant-to-be-delisted/a-15327052
[147] https://www.deutschlandfunkkultur.de/die-prozesse-gegen-industrielle-ig-farben-100.html
[148] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York : Free Press, 1978, p. 204
[149] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York : Free Press, 1978, pp. 204-205
[150] https://medium.com/dan-sanchez/the-dulles-brothers-and-their-legacy-of-perpetual-war-94191c41a653
[151] https://history.state.gov/departmenthistory/people/lansing-robert
[152] https://catalog.archives.gov/id/6948411
[153] https://www.scoop.co.nz/stories/HL0612/S00194.htm
[154] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York: Free Press, 1978, pp. 208-209
[155] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, pp. 89-90
[156] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York: Free Press, 1978, p. 209
[157] Joseph Borkin, «The crime and punishment of I.G. Farben», New York: Free Press, 1978, p. 210
[158] https://declanoreilly.weebly.com/seize–squander.html
[159] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, p. 90
[160] https://www.e-periodica.ch/cntmng?pid=bzg-002%3A1991%3A91%3A%3A433
[161] Richard Nikolaus Coudenhove-Kalergi, Ein Leben für Europa, Leipzig 2019
[162] https://hls-dhs-dss.ch/it/articles/046887/2011-02-03/ ; Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, p. 91
[163] https://www.uek.ch/it/schlussbericht/Publikationen/zusammenfassungen/02interhandel.htm
[164] Declan O’Reilly, «Morals and Money: Ideology and Pragmatism in the Kennedy Administration’s Settlement of the Interhandel-General Aniline &Film Case 1962-1965», in JOURNAL OF ECONOMICS AND DEVELOPMENT STUDIES, Vol. 8, No. 2, American Research Institute for Policy Developmen, June 2020, p. 35
[165] https://css.ethz.ch/content/dam/ethz/special-interest/gess/cis/center-for-securities-studies/pdfs/ZB-82.pdf, pages 43-46 ; Florian Keller, Botschafter Porträts, Chronos Verlag, Zürich 2017, pages 367-368; https://www.swissinfo.ch/eng/politics/diplomatic-documentary_remembering-switzerland-s-role-in-the-american-hostage-crisis-in-iran/44731268
[166] Colloquio personale con Partick Martin del 13 novembre 2022
[167] Res Strehle, Gian Trepp, Barbara Weyermann, «Ganz oben – 125 Jahre Schweizerische Bankgesellschaft», Limmat Verlag, 1987, pp. 91-92
[168] https://www.sueddeutsche.de/politik/henry-kissinger-staatskunst-richard-nixon-margaret-thatcher-globale-politik-globale-krisen-1.5631159
[169] https://www.jfklibrary.org/asset-viewer/archives/MBPP
[170] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, pp. 43-45
[171] https://wcfia.harvard.edu/people/in_memoriam/rbowie
[172] https://www.pulitzer.org/article/moral-necessity-society-marked-power
[173] Andrew Preston, «The Little State Department: McGeorge Bundy and the National Security Council Staff, 1961-65», Presidential Studies Quarterly Vol. 31, No. 4, December 2001, p. 635
[174] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, pp. 48-51
[175] https://www.americanforeignrelations.com/E-N/National-Security-Council-The-kennedy-and-johnson-years.html
[176] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 51
[177] Robert H. Connery, “Nelson A. Rockefeller as Governor”, Proceedings of the Academy of Political Science, Vol. 31, no. 3, 1974, p. 4
[178] https://www.washingtonpost.com/wp-srv/politics/daily/may98/goldwater30.htm
[179] https://www.jfklibrary.org/sites/default/files/archives/JFKOH/Lodge%2C%20Henry%20Cabot/JFKOH-HCL-01/JFKOH-HCL-01-TR.pdf
[180] Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 56
[181] https://www.newyorker.com/magazine/2020/05/18/the-myth-of-henry-kissinger
[182] https://www.nixonfoundation.org/2015/06/the-formation-of-a-new-national-security-council/ ; Thomas A. Schwarz, «Henry Kissinger and American Power» – a political biography, Hill and Wang, New York, 2020, p. 63
[183] https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB503/
[184] https://www.nytimes.com/1975/02/27/archives/the-kissinger-doctrine.html
[185] https://history.state.gov/historicaldocuments/frus1969-76v06/d238
[186] https://www.bbc.com/news/world-asia-pacific-10684399 ; https://www.nytimes.com/1975/02/27/archives/the-kissinger-doctrine.html
[187] https://www.sciencespo.fr/mass-violence-war-massacre-resistance/en/document/lon-nol.html
[188] Giuseppe De Lutiis, La strage. L’atto d’accusa dei giudici di Bologna. Editori Riuniti, Roma 1986; https://www.raiplay.it/video/2018/08/2-agosto-1980-la-strage-di-Bologna—02082018-ae566a8f-efcd-48c4-a785-f7e65996d946.html
[189] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/1990/12/02/morto-vito-miceli.html
[190] https://www.sicurezzanazionale.gov.it/sisr.nsf/chi-siamo/la-nostra-storia.html#Il-sistema-nazionale-di-sicurezza-e-intelligence-nel-secondo-dopoguerra-1948-2007
[191] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[192] http://legislature.camera.it/chiosco.asp?cp=1&position=V%20Legislatura%20/%20I%20Deputati&content=deputati/legislatureprecedenti/Leg05/framedeputato.asp?Deputato=d5690
[193] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/1990/12/02/morto-vito-miceli.html
[194] http://dati.camera.it/ocd/deputato.rdf/d16140_7
[195] https://history.state.gov/departmenthistory/people/martin-graham-anderson
[196] Mario Guarino, Fedora Raugei, “Licio Gelli – Vita, misteri, scandali del capo della Loggia P2”, edizioni Dedalo, 2016, p. 99
[197] https://www.nytimes.com/1976/01/30/archives/us-paid-800000-to-italian-general-cia-fought-move-us-gave-800000-to.html
[198] https://www.nytimes.com/1975/01/19/archives/the-secret-committee-called-40-at-least-in-theory-it-controls-the.html
[199] XIII legislatura – Disegni di legge e relazioni – Documenti – IV. 3 La “Rosa dei Venti”, pp.177-185
[200] XIII legislatura – Disegni di legge e relazioni – Documenti – IV. 3 La “Rosa dei Venti”, p.189
[201] https://hdgoe.at/terrorismus-suedtirol
[202] L’Espresso, 14 febbraio 2008, pag. 85
[203] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/2012/07/29/la-strage-dimenticata.html ; https://www.theguardian.com/world/2007/mar/04/race.otherparties ; https://mappedimemoria.it/stragi/italicus/la-strage/ ; https://www.strano.net/stragi/tstragi/relmp2/rel14p2.htm
[204] XIII legislatura – Disegni di legge e relazioni – Documenti – IV. 3 La “Rosa dei Venti”, p.177 n. 168
[205] XIII legislatura – Disegni di legge e relazioni – Documenti – IV. 3 La “Rosa dei Venti”, p.189
[206] Mario Guarino, Fedora Raugei, “Licio Gelli – Vita, misteri, scandali del capo della Loggia P2”, edizioni Dedalo, 2016, p. 80
[207] https://www.scoop.co.nz/stories/HL0807/S00195/cia-network-of-stay-behind-secret-armies.htm
[208] https://journals.sagepub.com/doi/full/10.1177/0968344520914345
[209] https://www.yumpu.com/it/document/view/14954735/la-connessione-svizzera-centro-studi-monetari ; http://documenti.camera.it/leg17/resoconti/commissioni/stenografici/pdf/24/audiz2/audizione/2017/11/29/leg.17.stencomm.data20171129.P1.com24.audiz2.audizione.0234.pdf ; Gian Trepp, Swiss Connection, Unions, Zürich 1999; http://documenti.camera.it/leg17/resoconti/commissioni/stenografici/html/24/audiz2/audizione/2017/11/29/indice_stenografico.0234.html
[210] Gian Trepp, Swiss Connection, Unions Verlag, Zürich 1999
[211] Commissione Parlamentare d’Inchiesta sul Terrorismo in Italia e sulle cause della mancata individuazione dei responsabili delle stragi, Legislatura XIII, doc. XXIII, n. 64, vol. 1, tomo II, pp. 101-102
[212] Commissione Parlamentare d’Inchiesta sul Terrorismo in Italia e sulle cause della mancata individuazione dei responsabili delle stragi, Legislatura X, Resoconti stenografici delle sedute, vol. 7, p. 384
[213] Letizia Marini, «Resistenza antisovietica e guerra al comunismo in Italia. Il ruolo degli Stati Uniti 1949-1974», Università degli Studi di Macerata, 2020, p. 17
[214] https://www.adnkronos.com/membri-gladio-come-partigiani-siano-equiparati-a-militari_7mIXA5RKurJYdnavoHv9N2
[215] https://www.stay-behind.it/wp-content/uploads/2022/01/elenco-622-gladiatori.pdf
[216] https://presidenti.quirinale.it/page/8/cos-biografia.html
[217] https://www1.adnkronos.com/Archivio/AdnAgenzia/2002/05/08/Politica/GLADIO-RIVELAZIONI-DI-TAVIANI-MANOVRA-CONTRO-COSSIGA_192200.php
[218] https://www.interno.gov.it/it/paolo-emilio-taviani
[219] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/1990/11/21/un-gladio-in-mano-de-lorenzo.html
[220] https://www.focus.it/cultura/storia/la-verita-su-piazza-fontana ; https://www.ilsole24ore.com/art/strage-piazza-fontana-cosa-e-successo-milano-12-dicembre-1969-ACQuq72?refresh_ce=1 ; https://www.corriere.it/cultura/20_ottobre_16/piazza-fontana-l-ombra-cia-l-indagine-riservata-taviani-64aa550c-0fac-11eb-8d21-ff516c396863.shtml
[221] https://www.cambridgeclarion.org/press_cuttings/vinciguerra.p2.etc_graun_5dec1990.html
[222] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/2000/08/04/maletti-la-spia-latitante-la-cia-dietro.html
[223] https://milano.repubblica.it/cronaca/2021/07/19/news/gianadelio_maletti_morto_johannesburg_servizi_segreti_depistaggio_piazza_fontana_sid_pecorelli_loggia_p2-310867564/
[224] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[225] https://www.repubblica.it/politica/2022/04/15/news/al_senato_lelogio_di_gianadelio_maletti_il_generale_coinvolto_nello_stragismo-345530720/
[226] https://www.scoop.co.nz/stories/HL0807/S00195/cia-network-of-stay-behind-secret-armies.htm
[227] https://www.parlamento.it/parlam/bicam/terror/stenografici/steno72.htm
[228] http://www.strano.net/stragi/stragi/p2/elep2.htm
[229] http://www.strano.net/stragi/stragi/p2/elep2.htm
[230] http://www.strano.net/stragi/stragi/p2/elep2.htm
[231] Commissione parlamentare d’inchiesta sulla Loggia Massonica P2, Legislatura IX, Relazione di minoranza dell’onorevole Giorgio Pisanò, p. 132
[232] Commissione Parlamentare d’Inchiesta sul Terrorismo in Italia e sulle cause della mancata individuazione dei responsabili delle stragi, Legislatura XIII, Doc. XXIII n. 64, Vol I, Tomo II, Stragi e terrorismo in Italia dal dopoguerra al 1974, p. 159
[233] Commissione Parlamentare d’Inchiesta sul Terrorismo in Italia e sulle cause della mancata individuazione dei responsabili delle stragi, Legislatura XIII, Doc. XXIII n. 64, Vol I, Tomo II, Stragi e terrorismo in Italia dal dopoguerra al 1974, pp. 161-163
[234] Commissione parlamentare d’inchiesta sul fenomeno della Mafia e sulle Associazioni criminali similari, Legislatura XI, seduta del 16 novembre 1992, Audizione del collaboratore della giustizia Tommaso Buscetta, p. 370
[235] Francesco M. Biscione, «Il partito del golpe nella strategia della tensione», in «Dimensioni e problemi della ricerca storica», Rivista del Dipartimento di Storia Antropologia Religioni Arte Spettacolo della Sapienza Università di Roma, n. 2, 2020, p. 44
[236] Francesco M. Biscione, «Il partito del golpe nella strategia della tensione», in «Dimensioni e problemi della ricerca storica», Rivista del Dipartimento di Storia Antropologia Religioni Arte Spettacolo della Sapienza Università di Roma, n. 2, 2020, pp. 51-52
[237] Tim Weiner, «Legacy of Ashes: The History of the CIA», Doubleday, 2007, p. 299
[238] Francesco M. Biscione, «Il partito del golpe nella strategia della tensione», in «Dimensioni e problemi della ricerca storica», Rivista del Dipartimento di Storia Antropologia Religioni Arte Spettacolo della Sapienza Università di Roma, n. 2, 2020, pp. 51-52
[239] https://www.lacittafutura.it/interni/la-natura-classista-dello-stato-ii-parte
[240] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[241] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[242] Holly Sklar, Trilateralism: The Trilateral Commission and Elite Planning for World Management. South End Press, Boston 1980; Gian Trepp, Swiss Connection, Unions Verlag, Zürich 1999, pages 358-391; https://www.publiceye.ch/en/topics/corruption/switzerland-offshore-welcome-to-shell-company-paradise/in-ticino-fiduciary-firms-get-involved-in-fashion-commodity-trading-and-hidden-cash-flows
[243] Commissione parlamentare d’inchiesta sulla Loggia Massonica P2, Legislatura IX, Doc. XXIII n. 2-bis/2, Relazione di minoranza dell’onorevole Giorgio Pisanò, pp. 6-7
[244] https://home.treasury.gov/about/history/prior-secretaries/david-m-kennedy-1969-1971
[245] https://www.lastampa.it/vatican-insider/it/2011/06/30/news/la-parabola-di-paul-marcinkus-dal-paese-di-al-capone-allo-scandalo-ior-1.36958843
[246] Commissione parlamentare d’inchiesta sulla Loggia Massonica P2, Legislatura IX, Doc. XXIII n. 2-bis/2, Relazione di minoranza dell’onorevole Giorgio Pisanò, p. 17
[247] Commissione parlamentare d’inchiesta sulla Loggia Massonica P2, Legislatura IX, Doc. XXIII n. 2-bis/2, Relazione di minoranza dell’onorevole Giorgio Pisanò, p. 20
[248] https://ricerca.repubblica.it/repubblica/archivio/repubblica/2002/01/18/morto-ortolani-signor-nessuno-della-p2.html
[249] https://www.ansa.it/sito/notizie/speciali/2020/07/29/strage-di-bologna-nuova-inchiesta-gelli-mandante_287bbdf1-9b3d-4443-b936-fb5d0d0856a5.html
[250] https://www.avvenire.it/agora/pagine/kissinger-1
[251] https://internationalhistory.intesasanpaolo.com/world-map/detail/IT-ISP-MAPPAESTERA-0000279/buenos-aires-banco-ambrosiano-de-america-del-sud-sa
[252] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[253] https://www.repubblica.it/politica/2015/12/16/news/p2_i_nomi_piu_importanti_della_lista_gelli-129591682/
[254] Mario Guarino, Fedora Raugei, “Licio Gelli – Vita, misteri, scandali del capo della Loggia P2”, edizioni Dedalo, 2016, p. 129
[255] https://amerika21.de/2016/08/157676/neue-us-dokumente-diktatur-arg
[256] https://www.maurizioturco.it/bddb/2007_08_08_il_sole_24_ore_c.html
[257] https://www.fondazionecipriani.it/home/index.php/scritti/15-economia-selvaggia/33-intervista-a-radio-popolare-sulla-vicenda-calvi-banco-ambrosiano
[258] http://www.fondazionecipriani.it/Scritti/palermo.html
[259] https://taz.de/Diskussion-ueber-Colonia-Dignidad-in-Chile/!5280265/
[260] http://www.fondazionecipriani.it/Scritti/palermo.html
[261] https://www.nytimes.com/1974/01/14/archives/rockefeller-holdings-studied-state-law-is-cited-took-no-interest.html
[262] https://www.nytimes.com/1972/03/21/archives/anderson-charges-plot-against-allende-by-itt-and-cia.html
[263] https://www.nytimes.com/1972/07/03/archives/papers-show-itt-urged-us-to-help-oust-allende-suggestions-for.html
[264] https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile02.pdf
[265] https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile03.pdf
[266] https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile05.pdf ; https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile06.pdf ; https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile07.pdf
[269] https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB110/chile08.pdf
[270] https://english.elpais.com/elpais/2011/02/01/inenglish/1296541247_850210.html
[271] https://oxfordre.com/latinamericanhistory/view/10.1093/acrefore/9780199366439.001.0001/acrefore-9780199366439-e-623
[272] https://www.theguardian.com/news/2020/sep/03/operation-condor-the-illegal-state-network-that-terrorised-south-america
[273] https://thewire.in/history/the-chilean-right-made-colonia-dignidad-possible ; https://www.menschenrechte.org/de/2008/06/03/ss-standartenfuhrer-rauff-chile/ ; https://www.aerzteblatt.de/archiv/114215/Colonia-Dignidad-Sektenarzt-flieht-nach-Deutschland
[274] https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36792543
[275] https://islandora.wrlc.org/islandora/object/terror%3Aroot
[276] https://www.theguardian.com/us-news/2018/dec/04/george-bushs-legacy-isnt-so-peaceful
[277] https://zigorimedia.wordpress.com/2015/09/20/wirkt-noch-heute-nazis-und-faschisten-im-dienst-der-globalen-us-interessen/ ; https://zeroanthropology.net/2019/03/29/on-duty-for-the-cia-german-nazis-and-italian-fascists/
[278] https://www.mosaics.ch/es/blog-espanol/2021/1/18/una-historia-pintada
[279] https://www.academia.edu/53666696/Nazism_and_fascism_in_the_CIA_Italy_and_South_America_after_WW2_Quotes_from_the_German_Netflix_documentary_Nazis_in_the_CIA_2012_Uploaded28Sept21 ; https://www.degruyter.com/document/doi/10.12987/9780300199321-013/pdf
[280] Willi Winkler, Der Schattenmann: Von Goebbels zu Carlos: Das mysteriöse Leben des François Genoud, Rowohlt, Berlin 2011, pages 70-85; https://www.spiegel.de/geschichte/fran-ois-genoud-und-joseph-goebbels-tagebuecher-a-953258.html
[281] Karl Laske, Ein Leben zwischen Hitler und Carlos. François Genoud, Limmat Verkag, Zürich 1996; Willi Winkler, Der Schattenmann: Von Goebbels zu Carlos: Das mysteriöse Leben des François Genoud, Rowohlt, Berlin 2011, pages 70-85; https://www.spiegel.de/geschichte/fran-ois-genoud-und-joseph-goebbels-tagebuecher-a-953258.html
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