VIOLETA PARRA, LA LIBERTAD ES UN DOLOR ABSOLUTO

Si se quiere luchar para cambiar el mundo, hay que utilizar armas no convencionales, como la música y la poesía. Así lo hizo Violeta Parra, lápiz y guitarra, en guerra con la vida que no perdona a nadie, pero castiga a unos más que a otros. La vida de una mujer, que eligió la música y el amor para su Chile, canta las canciones de los campesinos. Ella no impugna. Ella desobedece. Y esta desobediencia la hace libre de no aceptar compromisos, ventajas personales, grilletes religiosos y sociales.

Poeta y cantautora autodidacta, Violeta es, primero para Chile y luego para el mundo entero, la voz de los derechos humanos, un gesto antes que una palabra[1]. Toda su vida, intenta frenéticamente saciar su sed de amor, de justicia, de libertad[2]. Inquietos. y dotada de una vena creativa inagotable, enamorada del pueblo y de la participación social, es melancólica y rebelde, y tiene que luchar por el reconocimiento de su obra[3]: hija de la tierra de los tambores gauchos de la Pampa, de los caminos polvorientos y sin asfaltar, de la pobreza extrema, de la riqueza ostentosa, de la opresión de la dictadura, de la alegría ilógica de vivir, de las extensiones infinitas de tierra y hielo, del caos más total, de los colores más vivos, de la gente que baila y sonríe a pesar de todo[4].

Tiene un físico esbelto, ojos negros como la noche, severos y delicados como el rostro cansado que se reclina sobre la guitarra[5]. Es la protagonista del renacimiento de la música popular, germen e inspiración de lo que sería la Nueva Canción Chilena, el movimiento cultural que, a través de la recuperación de la tradición y la adaptación a los ritmos latinoamericanos, con la explosión artística de Víctor Jara y el Inti-Illimani utilizaría la música como arma política contra la injusticia social[6]. Violeta primero se toma a pecho las luchas de los campesinos[7]. El solo hecho de recuperar los cantos populares, para defender la identidad y el orgullo de los campesinos chilenos, tiene un valor revolucionario y antiimperialista, porque la cultura del poder está infiltrada por la decadencia y la corrupción política de los Estados Unidos, de la transformación del pueblo de ciudadano a consumidor[8]. Una transformación imposible para quienes no tienen trabajo, ni agua ni luz, y apenas lo suficiente para alimentarse.

Profundamente inquieta, capaz de pasar de una alegría irresistible a una repentina depresión, su rasgo más llamativo es su increíble energía, su pasión, su capacidad para comprometerse emocionalmente[9]. Es una mujer moderna, en constante movimiento para aprender y experimentar, y es castigada con una dolorosa vida amorosa en un país dominado por un machismo arcaico que la quiere relegada sólo a las actividades domésticas. Con la cara marcada por la viruela, su cuerpo menudo vestido con sencillez, Violeta es bella porque es una fuerza de la naturaleza, y porque ama con todo su ser: a un hombre, a una idea, a su pueblo[10]. Y está tan avanzada que, para lograr el enorme éxito internacional del que goza, tiene que morir, y sus hijos y nietos tienen que continuar con su arte.

Hija de la música y la pobreza

Verano de 1934: Violeta, junto a su hermano Eduardo, acaba de cumplir 17 años[11]

La tercera de nueve hermanos[12] (incluyendo dos hermanastras[13]), Violeta Parra del Carmen Sandoval[14] nació el 4 de octubre de 1917, en uno de los dos pequeños pueblos chilenos: San Fabián de Alico[15] , un pequeño pueblo en la provincia de Ñuble, y el vecino San Carlos[16] , en la provincia de Chillán[17]. Es hija de Clarisa del Carmen Sandoval Navarrete y Nicanor Parra Alarcón, gente humilde y acomodada[18], cuya única ocupación es llegar a fin de mes, trabajando en los más variados oficios[19], especialmente con su madre como costurera[20]. Reciben en su casa a artistas de circo, de los que sus hijos aprenden magia y a hacerla[21], y el Sr. Parra transmite a sus hijos la pasión por el cante, la guitarra y el folclore.

A los nueve años, Violeta toca la guitarra, a los doce compone sus primeras canciones[22], a los veintitrés se gradúa como profesora de primaria y debuta en un teatro de la capital chilena[23]. Sus hermanos no son menos impresionantes: Eduardo y Luis Roberto son dos cantautores consagrados, Oscar René (conocido como Tony Canarito) es equilibrista de circo[24], y el mayor, Nicanor [25], fallecido a los 103 años, es una de las mayores figuras literarias modernas de Chile[26]: un poeta revolucionario, un antinorteño, que en Sudamérica Nicanor Parra es tan leyenda como el Che Guevara[27].

Tras dos años en Santiago, en 1921 su padre obtuvo una cátedra en Lautaro, en la región de la Araucanía, un viaje hacia el sur de más de 650 kilómetros, durante el cual Violeta contrajo la viruela[28]. Seis años después, en 1927, su padre pierde el trabajo y empieza a beber[29]. La familia se ve obligada a partir de nuevo y a instalarse en Villa Alegre. A la serenidad de la infancia se oponen las penurias de la pobreza[30]. Mientras Nicanor Parra da clases particulares, los niños ganan algo de dinero como lavaplatos o en el cementerio, limpiando tumbas[31]. Violeta canta en bares de mala muerte, en la calle, en restaurantes, en todas partes, incluso en los trenes, y cuando descubre la guitarra de su madre a los 9 años, aprende a mover los dedos sobre las cuerdas por sí misma.

Con su hermana mayor, Hilda[32] se une a Eduardo y Luis Roberto, que viven en un circo, pero las ya precarias condiciones económicas empeoran. Al año siguiente de la muerte de su padre (1931), a la edad de 14 años, Violeta decide cambiar su vida[33]: deja su casa con sólo la ropa que lleva puesta y su guitarra, y se marcha a Santiago, donde estudia Nicanor. Canta en los restaurantes cercanos a la estación de tren y a lo largo de la Avenida Matucana, una calle histórica del centro, donde ahora se encuentra el Circuito Cultural Santiago Poniente. En sus calles predominan los boleros, las rancheras, los corridos mexicanos y la cueca chilena[34], música popular y nunca remilgada.

Violeta entró en contacto con intelectuales, escritores, poetas: conoció a Luis Oyarzún Peña, a Pablo de Rokha[35] y a Pablo Neruda, quien le dedicó el poema ‘Elegía para Cantar’, llamándola ‘Santa de greda pura’[36]. El primero, Luis, amigo de Nicanor, es el primer amor de Violeta[37], pero su encuentro con el ferroviario y sindicalista Luis ‘Pepe’ Cereceda[38] es el que la conmociona para siempre. Se encuentra con él en el restaurante Tordo Azul, donde el dúo ‘Las Hermanas Parra’ (Violeta y su hermana[39]) interpreta un repertorio de música española[40]. Cereceda es miembro del Partido Comunista, involucra a Violeta en la actividad política, y ambos participan en la campaña presidencial de Gabriel González Videla[41]. Ambos se casan en 1938, y tienen dos hijos: Isabel (1939) y Ángel (1943), que continuarán la obra artística de su madre[42] y, durante la dictadura de Pinochet, al igual que los Inti-Illimani, vivirán exiliados en Italia[43]. Pero la pareja pronto entró en crisis[44]: Violeta no era el ama de casa con la que su marido creía haberse casado[45]. Su conciencia política, el interés por la gente, la cultura y la investigación musical se fortalecen en ella[46] : demasiado para el machismo convencional de Cereceda[47].

Corazón, responde, por qué palpita, sí, por qué palpita, como una campana es algo que me vuelve loco, sí, que se ha vuelto loco. Por qué palpita. No ves que paso la noche en vela, sí, la paso en vela, como un mar violento la carabela, sí, la carabela. Me mantienes despierto. Cuál es mi pecado Maltratarme, sí, maltratarme, como el prisionero por los gendarmes, Sí, por los gendarmes. Quieres matarme. Pero a ti te esconden duros muros, sí, duros muros, Y oprimen mi sangre en las redes, sí, en las redes, ¿Por qué no te rindes? Maldito corazón sin miramientos, sí, sin miramientos, Ciego, sordo y mudo de nacimiento, sí, de nacimiento. Me atormentas[48]

En 1948 los dos se divorciaron[49]. Violeta, en un Chile en el que el divorcio es una locura (sobre todo desde el punto de vista económico), no puede más[50]. Y un año después, en 1949, Violeta conoció a Luis Arce, que se convirtió en su segundo marido. Tiene dos hijas con él: Carmen Luisa y Rosita Clara. Este último muere en 1952[51] mientras Violeta está de gira por Europa. El drama de esta muerte y los violentos reproches de su marido también ponen fin a este matrimonio[52]. Para Violeta no hay alternativa, ya que es más apreciada en el extranjero que en su propio país[53]. En 1956, en París, tiene un romance con el joven español Paco Ruz, al que dona su guitarra. En 1958, mientras trabajaba para la Universidad de Concepción, entabló amistad con el pintor Julio Escámez y, en 1960, conoció al que sería su último y gran amor, el músico suizo Gilbert Favre[54] , a quien dedicó algunas de sus más famosas canciones de amor (como «Corazón Maldito», luego interpretada por los Inti-Illimani)[55].

Madurez artística

1966: Violeta Parra con Gilbert Favre y el grupo Los Choclos en Peña Naira, Bolivia[56]

El punto de inflexión en la vida de Violeta se produjo hacia 1952. Hasta entonces, las actuaciones de las hermanas Parra no se diferenciaban mucho de los espectáculos folclóricos de la época, y la única distinción real estaba en el timbre de voz de Violeta, tan fuera de lo común: agudo, rasposo, deslizándose con facilidad hacia los lamentos o los gritos lacerantes[57]. Declara: «Para poder cantar así, mi voz se ha formado a lo largo de cuarenta años de sufrimiento»[58]. Es una especie de Frida Kahlo de la música: se inclina sobre su instrumento como si lavara los paños empapados de sangre y la historia en agua negra[59].

Es la época en la que Violeta gana un concurso de canto español[60], graba sus primeros discos y exige que en las portadas aparezcan las letras de las canciones como prueba de la importancia que da a las palabras que, según ella, están por encima de las melodías. Ella misma diseña las cubiertas[61]. Es gracias a su hermano poeta, de vuelta de Inglaterra, que en ese momento estaba investigando la poesía popular chilena del siglo XIX[62], que se inspiró para buscar su propio camino fuera de los caminos del folclore tradicional y decidió emprender un viaje. Una pequeña mujer, armada con cuadernos, bolígrafos y una grabadora, que se convierte en su compañera de viaje y a la que nunca abandonará.

Sola, o acompañada por sus hijos, recorre el país en busca de las raíces musicales de su pueblo. Se trata de una tarea ingente y agotadora (imagina las calles de Chile en los años 50), que dura años, en la que recupera miríadas de canciones populares directamente de las voces de los campesinos. Es en este punto donde Violeta percibe claramente su papel cultural: este trabajo se traduce en unas colecciones de canciones populares que están a punto de desaparecer de la memoria colectiva[63]. Vuelve a ella con más fuerza que nunca, para librar una lucha sin cuartel por el reconocimiento, el apoyo y la financiación, una lucha que la desgasta física y espiritualmente[64]

Narra la cultura olvidada de los indios de la Patagonia, los mapuches[65], y lucha por la dignidad y los derechos humanos de todo pueblo marginado. Cuando el dúo con Hilda se rompió, su repertorio cambió: incorporó géneros musicales recién redescubiertos y empezó a componer su propia música y canciones. En sus letras está el ser humano, la muerte, el dolor, hay espiritualidad y tierra, hay una vida palpitante y una sabiduría instintiva[66]. En estos años de madurez artística, se acercó a la élite intelectual de Chile.

Con Pablo Neruda escribe ‘El pueblo’, y él le dedica el poema ‘Elegía para cantar’. Cuanto más se adentra en el largo viaje para redescubrir sus raíces, más espartana y esencial se vuelve su apariencia externa. Vestida con sencillez, sin maquillaje, Violeta da conciertos en universidades y trabaja en la radio como divulgadora[67], sabiendo que se ha convertido en un símbolo[68]. En 1954, cuando recibe el premio Caupolicán, el Oscar chileno[69], es invitada al Festival de la Juventud de Varsovia[70]: una nueva y emocionante etapa. Sueña con ser una juglar del comunismo mundial, y empieza a escribir canciones de extrema rabia revolucionaria y anticlerical[71].

Volver a los diecisiete años después de vivir un siglo es como descifrar signos sin ser un sabio competente, volver a ser de repente frágil como un segundo, volver a sentirse profundamente como un niño ante Dios, esto es lo que siento en este momento fértil. Enredarse, enredarse, como la hiedra en la pared, y brotar, brotar, como el musgo en la piedra. Como el musgo en la piedra, Oh sí, sí, sí. Mi paso atrás cuando el tuyo avanza, El arco de los pactos ha penetrado en mi nido, Con todos sus colores ha pasado por mis venas, Y hasta las duras cadenas con que nos ata el destino es como un precioso diamante que ilumina mi alma serena. Es una maraña, una maraña, como la hiedra en la pared, y brota, brota, como el musgo en la piedra. como el musgo en la piedra, Oh sí, sí, sí. Qué puede hacer el sentimiento del conocimiento, ni el curso de acción más claro ni el pensamiento más amplio, todo se cambia por momentos como un mago condescendiente, nos aleja suavemente del rencor y la violencia, sólo el amor con su ciencia nos hace tan inocentes. Se enreda, se enreda, como la hiedra en la pared, y brota, brota, como el musgo en la piedra. Como el musgo en la piedra, Oh sí, sí, sí. El amor es un torbellino de pureza original, Hasta el animal feroz susurra su dulce trino, Detiene a los peregrinos, libera a los cautivos, El amor con sus cuidados convierte al anciano en niño, Y sólo el afecto por el malvado lo hace puro y sincero. Se enreda, se enreda, Como la hiedra en la pared, Y brota, brota, Como el musgo en la piedra. Como el musgo en la piedra, Oh sí, sí, sí. Abierta de par en par la ventana se abrió como por arte de magia, El amor entró con su manto como una cálida mañana, Al sonido de su hermosa alarma hizo florecer el jazmín, Voló como un serafín al cielo se puso sus pendientes y el querubín convirtió mis años en diecisiete el querubín los convirtió en diecisiete. Se enreda, se enreda, Como la hiedra en la pared, Y brota, brota, Como el musgo en la piedra. Como el musgo en la piedra, Oh sí, sí, sí[72]

Viajó por Alemania, la Unión Soviética, Italia y, finalmente, Francia, donde permaneció algún tiempo, instalándose en París y trabajando en el club nocturno L’Escale[73]. Para la escena intelectual francesa, que sólo ahora está saliendo del amaneramiento de una izquierda puesta de rodillas por la Segunda Guerra Mundial, Violeta es una nube de frescura. Allí conoció a Paul Rivet[74] , antropólogo y director del Musée de l’Homme, con quien grabó música y canciones de su tierra y su primer disco internacional, «Cantos del Chile»[75], en los Archivos Sonoros Nacionales de la Sorbona. En él, Violeta combina no sólo el folclore local, sino también su propia y creciente preocupación por las condiciones sociales del pueblo chileno y, en particular, por las dramáticas condiciones de los campesinos[76].

En París, conoce al gran amor de su vida: Gilbert Favre, un antropólogo y musicólogo suizo, 19 años menor que ella. Se refiere a él irónicamente, llamándolo «el gringo». Volvió a Chile, a Concepción, centro de gran efervescencia sociocultural. En 1957, trabaja en la Universidad para realizar investigaciones sobre la música tradicional y se compromete con el Museo Nacional del Arte Folclórico[77]. De vuelta a Santiago, termina de escribir su autobiografía en verso[78]. Al mismo tiempo, trabaja duro en sus propias canciones y se dedica a la pintura.

Durante su convalecencia de una grave forma de hepatitis, que en 1959 la obligó a permanecer en cama durante meses, Violeta comenzó a tejer tapices de yute, a pintar y, más tarde, a trabajar con papel maché. Reproduce los mismos motivos de siempre: «los tapices son como canciones pintadas». Sus obras son figuras humanas y animales de estilo naif con los colores vivos típicos de Chile y Perú[79]. Ese mismo año participó en la Feria de Artes Plásticas[80] y realizó cursos de folclore, cerámica y pintura tanto en Chile como en Argentina[81]. En cuanto se recuperó, regresó a Francia[82]. En 1962 se fue a Helsinki con sus hijos, invitada al Festival de la Juventud. Una vez terminada la gira europea, Violeta regresó a París, a una pequeña habitación del Barrio Latino. Por la noche, actúa en los clubes habituales. De día, escribe, pinta y teje tapices, y luego sale en busca de galerías donde exponer[83].

Gilbert la espera en su casa de Ginebra, donde Violeta va con Isabel y Ángel. En Ginebra, la Parras organizó conciertos folclóricos, pero poco después la cantante regresó a París con el titánico proyecto de exponer sus cuadros[84] en el Pabellón Marsan del Departamento de Arte Decorativo del Louvre, lo que hizo en 1964[85]. Será la primera mujer latinoamericana que exponga en una muestra individual en París. Pero incluso aquí, donde fue recibida con curiosidad, Violeta no se desenvolvió bien: la burguesía progresista era demasiado rica y distraída, con poco respeto por sus canciones populares y combativas, y todavía no había rastros del movimiento estudiantil de 1968[86].

Graba una serie de canciones de fuerte contenido social, publicadas póstumamente en 1971, participa en el partido L’Humanité y escribe el libro «Poésie populaire des Andes»[87], que se publicará dos años más tarde y, finalmente, agotada, regresa a Suiza a Gilbert. En Chile, todo está cambiando: los nuevos fermentos dan lugar al movimiento de la Nueva Canción Chilena[88]. En 1965 Violeta decidió volver a Chile y, junto a Patricio Manns[89] , escribió ‘Exiliada del Sur’, conoció al joven Víctor Jara[90] y, junto a él, fundó un sello discográfico llamado ‘Estampas de América’[91]. para el que los dos escribieron las grandes canciones que luego serían cantadas en todo el mundo por el Inti-Illimani[92]. Sus repertorios de denuncia sacuden los viejos cánones de la música popular.

L’arpillera, tapiz de Violeta Parra[93]

En Santiago, se abre La Peňa de los Parra, el corazón palpitante del nuevo movimiento cultural[94], un centro comunitario para las artes y el activismo político[95] fundado por Isabel y Ángel Parra y posteriormente transformado en una compañía discográfica[96]. Entre guitarras, vino y empanadas, se convierte en lugar de encuentro de artistas e intelectuales, como Tito Fernández, Gitano Rodríguez, Patricio Manns, las bandas Quilapayún, Illapu e Inti-Illimani: artistas cuyas obras son condenadas, y que se ven obligados a exiliarse para escapar de la persecución. Eran los años del sangriento golpe de Estado contra el presidente Salvador Allende.

En septiembre de 1973, el general Augusto Pinochet tomó el poder, abriendo de par en par las puertas del infierno. A Víctor Jara, capturado y llevado al Estadio Nacional de Chile, le rompieron las manos y le cortaron la lengua antes de caer bajo 44 disparos[97]. Pero eso llegará unos años más tarde. Mientras tanto, Violeta actúa en La Peňa de los Parra con sus hijos y Gilbert, quien, habiendo perfeccionado su conocimiento de la quena, la flauta andina, crea el grupo folclórico Los Jairas[98]. Comenzó la gestación de su último y titánico proyecto: la creación, en las afueras de Santiago, de un gran Centro de Arte Popular capaz de acoger y difundir lo mejor del folklore latinoamericano[99] , del que los discos «El folklore de Chile» (1957; 1961) son un testimonio excepcional[100].

Violeta se lanzó a este nuevo empeño, comprometiendo todas sus fuerzas y precarias economías: participó en festivales, grabó varios discos y actuó en radio y televisión. En diciembre de 1965, inauguró la gran carpa La Carpa de la Reina[101] , una carpa de circo en los suburbios de Santiago que se convertiría en un importante centro de cultura folclórica, dirigido junto a sus hijos. Detrás de La Carpa construyó su propia casa, un apartamento de una sola habitación hecho de ladrillos de barro, techo bajo y suelo de tierra apisonada, pero el proyecto resultó ser un fracaso: no hubo apoyo popular y los costes resultaron demasiado elevados[102].

Las emisoras de radio y las compañías discográficas son reacias a emitir su música, ya que su simpatía por las luchas de los trabajadores y la pobreza no es apreciada por el gobierno[103]. Esto la sume en una profunda depresión, agravada también por la ruptura de su relación con Gilbert[104], que se marcha a Bolivia. Le visita para convencerle de que vuelva con ella, pero le descubre feliz, casado. Para Violeta es una herida irremediable[105]. Vuelve a Chile y retoma el trabajo de nuevas canciones para el LP ‘Las últimas composiciones’, editado en 1966, legendario[106], y no sólo porque contiene el himno intemporal Gracias a la vida[107].

El 5 de febrero de 1967, después de tres intentos fallidos anteriores[108], Violeta se suicidó. Sola, en su estudio, se dispara en la cabeza[109]. La encuentran sentada en una pequeña silla que un aficionado había construido especialmente para ella[110], ya que medía poco más de un metro y medio[111]. Poco antes, había actuado en el escenario cantando ‘Gracias a la vida’[112]. Su testamento[113].

Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado dos ojos, que cuando los abro / Distingo perfectamente lo blanco de lo negro / Y en lo alto del cielo su fondo estrellado / Y entre la multitud el hombre que amo / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado el oído que a lo lejos / Graba el día y la noche, grillos, y canarios, / Martillos, torbellinos, ladridos, aguaceros / Y la voz tan dulce de mi amada / Gracias a la vida que tanto me ha dado / Me ha dado el sonido y el abecedario / Con las palabras que pienso y recito / Madre, amiga, hermano, y luz que ilumina / El camino del alma de quien estoy amando / Gracias a la vida que tanto me ha dado / Me ha dado el paso de mis pies cansados / Con ellos me he adentrado en ciudades y charcos / Playas y desiertos, montañas y llanuras / Y a tu casa, en tu calle y en tu patio / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado el corazón que late deprisa / Cuando veo el producto del cerebro humano / Cuando miro lo bueno lejos de lo malo / Cuando miro en lo profundo de tus ojos claros / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado la risa y me ha dado el llanto / Así distingo la alegría de la ruina / Los dos asuntos que componen mi canción / Y tu canción que es mi propia canción / Y la canción de todos que es mi propia canción / Gracias a la vida que me ha dado tanto[114]

Lo que queda de esa pasión

Un autorretrato de Violeta, que se convirtió en el cartel que anunciaba los conciertos de sus hijas[115]

América Latina está llena de mártires asesinados por el poder político, y las canciones y la poesía siempre han jugado un papel muy importante en las luchas sociopolíticas y en la identificación cultural y política de los ciudadanos. Sin embargo, la vida de la más grande de todas no fue segada por la mano asesina del poder, ni fue víctima de ninguna conspiración. Agotada por el cansancio, la enfermedad y las decepciones, Violeta ya no tiene fuerzas para luchar: ni por un proyecto, ni por el amor, ni por los derechos de su pueblo[116], y sufre el desinterés de la burguesía chilena[117].

Pero su prematura muerte da lugar a una figura mítica, cuyas canciones son perpetuadas por grupos icónicos como Inti-Illimani, pero también por mujeres mundialmente conocidas como Mercedes Sosa y Joan Baez[118]. Al igual que Ernesto «Che» Guevara, Violeta se convirtió en un símbolo tras su muerte. Sus retratos, los carteles con su carismático rostro, están por todas partes en Chile, dando testimonio de que su figura está arraigada en la cultura de las clases más pobres, que la consideran un símbolo de redención social[119].

Violeta ha dado a conocer su tierra al mundo, y su vida ha inspirado varios libros y películas a lo largo de los años[120]. En su honor, cada 4 de octubre, día de su nacimiento, se celebra el «Día de la Música y los Músicos Chilenos»[121]. En 2015 se le dedicó un museo en la capital, Santiago, en cuyo interior hay un edificio con forma de guitarra llamado «La Jardinera», en recuerdo de una de sus canciones. Para que se la llore tuvo que morir, para que se recuerden sus canciones, que son una bandera de América Latina[122]. Nació, vivió y se fue como una mujer libre, y una parte de su alma rebelde permanece dentro de cada sudamericano: «Escribe como te gusta escribir, usa los ritmos que te salgan, prueba diferentes instrumentos, siéntate al piano, destruye la métrica, grita en lugar de cantar, sopla la guitarra y rasga la trompa, odia las matemáticas y ama los vórtices, la creación es un pájaro sin plan de vuelo que nunca volará en línea recta». Como Violeta Parra[123].

 

[1] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[2] http://www.socialismolibertario.it/violeta_parra.htm

[3] https://www.lospaziobianco.it/violeta-parra-arte-paese/

[4] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[5]  https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[6] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[7]  https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[8] https://armunia.eu/2020/07/violeta-parra-arevalos-lopez/

[9]  http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[10] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[11] https://www.emol.com/fotos/2336/#1578882/Los-100-a%C3%B1os-de-Violeta-Parra

[12] https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[13] https://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[14] https://secondhandsongs.com/artist/91902

[15] https://www.skuola.net/universita/appunti/appunti-sulla-poetessa-violeta-parra#login-buy

[16] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[17] https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[18] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[19] https://180gradi.org/sociale/anita-picconi/una-donna-mille-voci-violeta-parra-pablo-neruda-cile

[20] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[21] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[22]  https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[23] https://www.antiwarsongs.org/artista.php?id=99&lang=it&rif=1

[24] https://www.geni.com/people/%C3%93scar-Ren%C3%A9-Parra-Sandoval-Tony-Canarito/6000000028140877204

[25] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[26] https://www.cinquecolonne.it/nicanor-parra-lantipoeta-della-poesia-cilena.html

[27] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[28]  https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[29] https://www.psicolinea.it/violeta-parra/

[30] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[31]  http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[32] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[33] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[34] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[35] https://www.psicolinea.it/violeta-parra/

[36]  https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[37] http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-98197.html

[38] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[39] https://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[40]  https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[41] https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-3430.htmlhttps://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[42] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[43] https://www.antiwarsongs.org/artista.php?id=99&lang=it&rif=1

[44] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[45] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[46] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[47] http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-98197.html

[48] Corazón, contesta, / por qué palpitas, sí, / por qué palpitas, / como una campana que se encabrita, sí, / que se encabrita. / Por qué palpitas. / No ves que la noche / La paso en vela, sí, la paso en vela, como en mar violento / la carabela, sí, la carabela. / Tú me desvelas. / Cuál es mi pecado pa maltratarme, sí, pa maltratarme, como el prisionero por los gendarmes, sí, por los gendarmes. / Quieres matarme. / Pero a ti te ocultan duras paredes, sí, duras paredes y mi sangre oprimes entre tus redes, sí, entre tus redes. / Por qué no cedes. / Corazón maldito sin miramiento, sí, sin miramiento, ciego, sordo y mudo de nacimiento, sí, de nacimiento. / Me das tormento.

[49] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[50] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[51] https://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[52]  http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-98197.html

[53] https://www.psicolinea.it/violeta-parra/

[54] http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-98197.html

[55] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[56] https://www.museovioletaparra.cl/cedoc/violeta-parra-con-gilbert-favre/

[57] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[58] https://progetto7lune.org/rubriche/luciallaluna/violeta-parra.html

[59] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[60] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[61] https://www.skuola.net/universita/appunti/appunti-sulla-poetessa-violeta-parra#login-buy

[62] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[63] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/ ; https://www.blogfoolk.com/2017/10/violeta-parra-lartista-cilena-che.html

[64] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[65] https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-54032225

[66] https://armunia.eu/2020/07/violeta-parra-arevalos-lopez/

[67] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[68] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[69] https://chiletoday.cl/violeta-parra-voice-of-the-poor-sound-of-a-country/

[70] https://www.psicolinea.it/violeta-parra/

[71] https://www.antiwarsongs.org/artista.php?id=99&lang=it&rif=1

[72] Volver a los diecisiete después de vivir un siglo es como descifrar signos sin ser sabio competente, volver a ser de repente tan frágil como un segundo, volver a sentir profundo como un niño frente a Dios, eso es lo que siento yo en este instante fecundo. Se va enredando, enredando, como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando, como el musguito en la piedra. como el musguito en la piedra, Ay si si si. Mi paso retrocedido cuando el de ustedes avanza, el arco de las alianzas ha penetrado en mi nido, con todo su colorido se ha paseado por mis venas y hasta las duras cadenas con que nos ata el destino es como un diamante fino que alumbra mi alma serena. Se va enredando, enredando,como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando, como el musguito en la piedra. como el musguito en la piedra, Ay si si si. Lo que puede el sentimiento no lo ha podido el saber, ni el más claro proceder ni el más ancho pensamiento, todo lo cambia el momento cual mago condescendiente, nos aleja dulcemente de rencores y violencias, sólo el amor con su ciencia nos vuelve tan inocentes. Se va enredando, enredando, como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando, como el musguito en la piedra. como el musguito en la piedra, Ay si si si. El amor es torbellino de pureza original, hasta el feroz animal susurra su dulce trino, detiene a los peregrinos, libera a los prisioneros, el amor con sus esmeros al viejo lo vuelve niño y al malo solo el cariño lo vuelve puro y sincero. Se va enredando, enredando, como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando, como el musguito en la piedra. como el musguito en la piedra, Ay si si si. De par en par la ventana se abrió como por encanto, entró el amor con su manto como una tibia mañana, al son de su bella diana hizo brotar el jazmín, volando cual serafín al cielo le puso aretes y mis años en diecisiete los convirtió el querubín. Se va enredando, enredando, como en el muro la hiedra, y va brotando, brotando, como el musguito en la piedra. como el musguito en la piedra, Ay si si si.

[73] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[74] https://artsandculture.google.com/entity/m0d7ybq?hl=it

[75]  http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[76] https://www.robadadonne.it/211530/violeta-parra-ragazza-chitarra/

[77] https://terzopianeta.info/cultura-societa/violeta-parra-musica-diritti-umani/

[78] https://www.skuola.net/universita/appunti/appunti-sulla-poetessa-violeta-parra#login-buy

[79] https://ytali.com/2016/12/12/non-era-solo-una-cantante-un-museo-a-santiago-per-violeta-parra/

[80]  http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[81]   http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[82] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[83] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[84]  https://cinemonitor.it/violeta-parra-orgoglio-cileno-anti-yankee/

[85] https://ytali.com/2016/12/12/non-era-solo-una-cantante-un-museo-a-santiago-per-violeta-parra/

[86] https://cinemonitor.it/violeta-parra-orgoglio-cileno-anti-yankee/

[87] https://archive.org/details/poesiepopulairedesandes/page/n29/mode/2up

[88]   http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[89] http://www.corohispanoamericano.it/MannsPatricio.htm

[90] https://www.corohispanoamericano.it/JaraVictor.htm

[91]  https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[92] https://www.antiwarsongs.org/artista.php?id=99&lang=it&rif=1

[93] https://www.cascada.travel/blog/the-world-of-violeta-parra

[94]  http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[95] https://readitaliano.com/wiki/it/Violeta_Parra

[96] http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-348769.html

[97] http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-348769.html

[98] http://musicaandina2011.blogspot.com/2011/12/los-jairas.html

[99]  http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[100] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[101] https://www.cambridge.org/core/books/abs/violeta-parra/violeta-parra-and-the-empty-space-of-la-carpa-de-la-reina/B895825E03FDD61A5FBFB5023EF6EF78

[102]  http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[103] https://www.cascada.travel/blog/the-world-of-violeta-parra

[104] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[105] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[106] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[107] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[108] https://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[109] https://www.pangea.news/violeta-parra-nicanor/

[110] https://www.antiwarsongs.org/artista.php?id=99&lang=it&rif=1

[111] https://www.corohispanoamericano.it/ParraVioleta.htm

[112] https://www.skuola.net/universita/appunti/appunti-sulla-poetessa-violeta-parra#login-buy

[113] https://www.psicolinea.it/violeta-parra/

[114] Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me dio dos luceros, que cuando los abro, / Perfecto distingo lo negro del blanco / Y en el alto cielo su fondo estrellado / Y en las multitudes el hombre que yo amo / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado el oido que en todo su ancho / Graba noche y dia, grillos y canarios, / Martillos, turbinas, ladridos, chubascos, / Y la voz tan tierna de mi bien amado / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado el sonido y el abecedario; / Con el las palabras que pienso y declaro: / Madre, amigo, hermano, y luz alumbrando / La ruta del alma del que estoy amando / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado la marcha de mis pies cansados; / Con ellos anduve ciudades y charcos, / Playas y desiertos, montanas y llanos, / Y la casa tuya, tu calle y tu patio / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me dio el corazon que agita su marco / Cuando miro el fruto del cerebro humano, / Cuando miro al bueno tan lejos del malo, / Cuando miro al fondo de tus ojos claros / Gracias a la vida que me ha dado tanto / Me ha dado la risa y me ha dado el llanto / Asi yo distingo dicha de quebranto, / Los dos materiales que forman mi canto, / Y el canto de ustedes que es mi mismo canto, / Y el canto de todos que es mi propio canto / Gracias a la vida que me ha dado tanto

[115] https://www.cancioneros.com/co/8984/2/isabel-parra-e-inti-illimani-homenajearan-a-violeta-con-canto-para-una-semilla

[116] http://www.sentieristerrati.org/2018/05/19/violeta-parra-un-metro-e-cinquanta-di-infinito-coraggio/

[117] https://www.repubblica.it/spettacoli/musica/2013/06/26/news/violeta_parra-61870022/

[118] http://www.enciclopediadelledonne.it/biografie/violeta-parra/

[119] https://virginiaepoi.wordpress.com/dellarte-e-degli-artisti/555-2/

[120] https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-7683.html

[121] https://www.cmtv.com.ar/biografia/show.php?bnid=2966&banda=Violeta_Parra

[122] http://infolatinos.over-blog.it/article-cile-violeta-parra-musica-passione-85857232.html

[123] https://cinemonitor.it/violeta-parra-orgoglio-cileno-anti-yankee/

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