El sábado 29 de mayo, en el estadio del Oporto, el Chelsea de Londres se proclamó campeón de la Liga de Campeones, al derrotar al equipo favorito, el Manchester City, por 1-0. Esto parece una noticia deportiva, pero no lo es. Como demuestra el intento de muchos de los grandes clubes europeos de crear una Superliga que ya no participe en los campeonatos nacionales, sino que sea una asociación exclusiva de los equipos más ricos del mundo[1], hay mucho más en juego que un balón y 22 tipos en pantalón corto corriendo detrás de él. Se trata de una cuestión política, social y económica muy importante.
El 29 de mayo, en Portugal, la familia gobernante del jeque Al-Nahyan en los Emiratos Árabes Unidos[2] fue derrotada por la familia del petrolero ruso Roman Abramovich[3], que ganó el trofeo de fútbol de clubes más importante del mundo por segunda vez en diez años. Para lograr este resultado, el jeque Mansour Bin Zayed Al-Nahyan, hermano menor del regente del poder en Abu Dhabi, Mohammed Bin Zayed Al-Nahyan, pagó 4.000 millones de dólares por la compra de las acciones y ahora gasta unos 600 millones de dólares cada año, 80 millones más que el Chelsea, para llevar al Manchester City a lo más alto de Europa[4].
Detrás del jeque, por supuesto, está toda la familia, ya que el director del Manchester City es Khaldoon Al Mubarak, director general y consejero delegado del Grupo Mubadala, cuyo jefe y máximo accionista es Mohammed Bin Zayed Al-Nahyan, y Mansour es el vicepresidente[5]. El Grupo Mubadala, un holding financiero que factura más de 240.000 millones de dólares al año[6], es el resultado de la concentración de todas las actividades financieras, de construcción, industriales y militares de los Emiratos Árabes Unidos[7], y es el proyecto concebido por Mohammed Bin Zayed Al-Nahyan para preparar a su país para un mundo en el que el petróleo ya no tenga el papel central que tiene hoy. Para entender el tamaño, todo el Producto Nacional Bruto es de 420.000 millones de dólares, menos del doble de la facturación de una sola empresa…
Las acciones del Manchester City, propiedad de la familia del jeque, están en un holding, City Football Group Ltd, una empresa con sede en Manchester que también controla los equipos del New York City FC, el Melbourne City (Australia), el Yokohama F. Marinos (Japón), Montevideo City Torque (Uruguay), Girona (España), Sichuan Jiunju (China), Mumbay City (India), Lommel SK (Bélgica) y Estac Troyes (Francia) [8]. No hay cifras oficiales sobre los costes de esta impresionante lista de equipos profesionales, a la que hay que añadir los 693 millones de dólares pagados para patrocinar las camisetas del Real Madrid y del Arsenal de Londres durante cinco años[9].
En la encarnizada rivalidad entre Emiratos y Qatar, Doha se apoya en la organización de eventos de talla mundial, como la Copa de la FIFA y el Gran Premio de Fórmula 1, así como en la carísima administración del París St. Germain[10]. Visto desde los ojos de los occidentales, ambas estrategias son insensatas e inútiles, y además se llevan a cabo mediante la esclavización de miles de inmigrantes y se llevan sustancias que podrían haberse utilizado para obras que mejorarían el nivel de vida de otras poblaciones musulmanas agobiadas por la guerra, la miseria, siendo rehenes de conflictos diplomáticos con un falso trasfondo religioso.
¿Por qué todo este dinero? ¿Obtener el afecto, el apoyo, la simpatía de los habitantes de las ciudades cuyos equipos, gracias al dinero de los Emiratos, pueden obtener mejores resultados deportivos? En la sociología moderna, desde hace un cuarto de siglo, se sostiene que está en marcha un proceso de cambio incontrovertible que, muy pronto, borrará toda percepción parroquial de la afiliación a un equipo, como ocurre en el deporte profesional estadounidense, cuyos clubes cambian de sede con relativa frecuencia cuando la administración de una ciudad ofrece mejores infraestructuras y trato fiscal[11].
La proclamación del título de campeón de los EAU del campeonato 2017-2018, ganado por el FC Al Ain, propiedad de Mohammed Bin Zayed Al-Nahyan[12]
Esto es lo contrario de lo que sienten la mayoría de los europeos, que están inextricablemente ligados a la pertenencia a una ciudad o incluso a un barrio. Son sobre todo los aficionados los que están dispuestos a gastar dinero en entradas y merchandising, como lo demuestra la verdadera sublevación de los hinchas de los clubes que hubieran querido participar en la Superliga y que, acusando a la dirección de traición, hicieron fracasar el proyecto en pocas horas[13].
Esto es algo que los dirigentes del Golfo no pueden entender, dado que en esos dos países el proletariado, que es la principal cantera de aficionados europeos, ha sido sustituido por inmigrantes (el 65,2% de los habitantes de Qatar, el 88,2% de los de Emiratos Árabes Unidos), tratados además en condiciones comparables a la esclavitud y, por tanto, poco interesados en el fútbol local. Y si bien es cierto que en Europa la expansión de la cobertura televisiva ha alejado a mucha gente del estadio (no en todas partes, dados los crecientes índices de audiencia en Alemania y el Reino Unido), esto no significa que el público haya decidido dejar de seguir a los pequeños clubes locales para emocionarse con sólo 12 clubes del mundo, como querían los creadores de la Superliga.
Como se ha mencionado, Qatar y los Emiratos siguen estrategias diferentes. El París St. Germain está controlado por la QIA Qatar Investment Authority, que, gracias a los enredos políticos que ha conseguido al trabajar con el equipo, ha obtenido el respaldo gubernamental necesario para convertirse en accionista de Barclays, Sainsbury’s, Harrods, Volkswagen, Walt Disney, el aeropuerto londinense de Heathrow, Siemens, Shell y mil cosas más, incluidos algunos de los mejores hoteles de Italia y, especialmente, de Cerdeña[14]. El fútbol, por tanto, es una forma de establecer relaciones comerciales, incluso antes que diplomáticas.
En los Emiratos, este concepto aparece completamente anulado. El campeonato nacional de fútbol está formado por 14 equipos, de los cuales al menos tres (los tres clubes con mayor tradición) pertenecen a la familia de Mohammed Bin Zayed Al-Nahyan[15]. En ningún otro país del mundo los equipos de fútbol pertenecen personalmente al hombre fuerte del régimen nacional. A pesar de que los Emiratos tienen cuatro veces más habitantes que Qatar, la media de espectadores en el campeonato qatarí es de 11.000, mientras que la de los Emiratos es menos de la mitad.
Esto significa que el campeonato de los Emiratos no es más que un instrumento para la imagen que la familia Al-Nahyan trata de establecer en todo el mundo. Ciertamente, si se observa con detenimiento, también hay acuerdos comerciales[16], pero no parecen tan importantes, también porque el grupo Mubadala prefiere establecer asociaciones industriales a simples operaciones de inversión financiera[17]. ¿Y qué? Si la final de la Liga de Campeones no es todos los años el Manchester City contra el París Saint Germain… si estos dos equipos no consiguen ganar siempre el campeonato nacional… si los aficionados siguen considerando a los dos equipos como uno inglés y otro francés… si todo esto es cierto, ¿qué sentido tiene tirar todos los años tantos miles de millones en este pozo sin fondo del fútbol profesional europeo?
[1] https://www.thenation.com/article/culture/european-soccer-super-league/
[2] https://www.independent.co.uk/news/people/profiles/sheikh-mansour-richest-man-football-2052350.html
[3] https://web.archive.org/web/20190630210353/https://www.telegraph.co.uk/sport/football/2406994/Bates-sells-off-Chelsea-to-a-Russian-billionaire.html
[4] https://www.forbes.com/sites/mikeozanian/2021/04/12/the-worlds-most-valuable-soccer-teams-barcelona-on-top-at-48-billion/?sh=421d05616ac5
[5] https://www.mubadala.com/en/who-we-are/investment-committee/khaldoon-al-mubarak ; https://www.mubadala.com/en/who-we-are/board-of-directors
[7] https://www.mubadala.com/en/who-we-are/corporate-structure
[8] https://www.cityfootballgroup.com/our-clubs/
[9] https://www.forbes.com/sites/mikeozanian/2021/04/12/the-worlds-most-valuable-soccer-teams-barcelona-on-top-at-48-billion/?sh=421d05616ac5
[10] https://www.sportspromedia.com/news/neymar-psg-qatar-national-bank-endorsement-deal
[11] https://www.docsity.com/it/sociologia-del-calcio/4160762/ ; https://journals.openedition.org/qds/1132
[12] https://www.the-afc.com/competitions/afc-champions-league/latest/news/al-ain-lift-uae-pro-league-title-in-style
[13] https://www.thenation.com/article/culture/european-soccer-super-league/
[14] https://www.tuttocagliari.net/altre-notizie/psg-e-non-solo-la-famiglia-al-thani-patrimonio-da-627-miliardi-di-dollari-19421
[15] https://en.wikipedia.org/wiki/UAE_Pro_League
[16] https://investmentpolicy.unctad.org/international-investment-agreements/treaty-files/425/download
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